Tipos de tumores: el meningioma
Entre los tumores que menos gravedad tienen para la vida del paciente, está el meningioma. ¿Qué debemos saber sobre él, cómo prevenirlo y tratarlo?
Un tumor es una masa anormal que se forma del tejido corporal, que puede ser maligno o benigno. Por lo general las células se dividen, crecen o mueren cuando se dañan. Así dan paso a células nuevas. Este proceso es controlado por el cuerpo, pero es posible que este equilibrio se altere. Cuando las células se dividen y se multiplican de una manera descontrolada y excesiva es cuando se forma un tumor. Existen varios tipos de tumores, pero en este caso hablaremos del meningioma.
Origen y grados del meningioma
El meningioma es un tumor que se forma en las meninges, que son las 3 membranas externas que protegen el cerebro. Es de los tumores primarios del sistema nervioso central y generalmente es benigno y puede crecer lentamente hasta ser diagnosticado. Son más frecuentes en las mujeres que en los hombres y el riesgo de padecerlo aumenta con la edad.
Estos tumores se clasifican en 3 grados. El meningioma de primer grado es el más común y crece lentamente. Al de segundo grado se le denomina meningioma atípico. Este tiene más posibilidades de volver a aparecer después de ser extirpado, pero es poco común. Incluye subtipos como el meningioma de células claras y el caroideo.
El de tercer grado se conoce como meningioma anáplasico maligno. Este es un tumor de rápido crecimiento con más posibilidades de reaparición y de metástasis a distancia. A pesar de ello, este tipo es aún menos común que el atípico. Entre los subtipos están el meningioma rabdoide y el papilar.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas también pueden ser sutiles y en algunos casos pueden confundirse con otras enfermedades. Igualmente dependen del tipo de meningioma. Se empiezan a sentir cuando el tumor comienza a presionar el cerebro o la médula espinal. Entre los principales síntomas están el dolor de cabeza, visión borrosa y pérdida del equilibrio. También se pueden presentar convulsiones y pérdida de audición u olfato.
El diagnostico debe hacerlo un neurólogo. Este especialista hará un examen neurológico completo y ordenará pruebas de imágenes. Estas pruebas serán una tomografía computarizada, que ofrece imágenes transversales del cerebro.
Por otro lado, está la resonancia magnética. Ofrece una imagen mucho más detallada del cerebro y los tumores. En este examen se usa un campo magnético y ondas transversales de una imagen del cerebro. En pocos casos puede ser necesario una biopsia.
El tratamiento
El tratamiento principal de un meningioma es la cirugía para extirparlo. En el caso de un meningioma de segundo y tercer grados la mayoría de las personas recibe un tratamiento adicional. Puede recomendarse administrar radiación para retrasar la reaparición del tumor. Otra opción puede ser la quimioterapia.
Si el meningioma no presenta síntomas es posible que nunca requiera tratamiento, solo monitoreo. Es importante, sin embargo, que si sientes alguno de estos síntomas o molestia acudas a un doctor para diagnosticarlo y tratarlo si es necesario.
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