El Maratón de Nueva York deja 415 millones en la ciudad
El primer fin de semana de noviembre Nueva York se viste de gala para acoger uno de los maratones más multitudinarios del mundo. Como es habitual, este año hubo más de 54.000 inscritos procedentes de 130 países distintos. El recorrido atlético por las principales calles de la ciudad norteamericana es una de las imágenes del año, reuniendo a corredores populares que buscan hacer realidad un sueño. Mientras tanto los comercios, hoteles y demás se frotan las manos. El Maratón de Nueva York deja unos 415 millones de dólares en la ciudad, que son unos 379 millones de euros. Este estudio fue realizado por la compañía AECOM, especializada en el análisis económico y centrándose en los datos del pasado año.
Para ello se tomaron en cuenta tanto el Maratón como el New York Road Runner, (NYRR), una prueba de menor recorrido que se celebra de manera complementaria. Precisamente el consejero delegado de NYRR, Michael Capiraso, reconoce que el «maratón tanto atrae a toda la ciudad como genera actividad para la comunidad empresarial». Entre los grandes beneficiarios se encuentran proveedores locales como hoteles y restaurantes. Tanto corredores como sus acompañantes pueden disfrutar de los servicios que ofrecen en la ciudad durante los días que dura esta carrera, que van más allá de las cuatro o cinco horas que dure la prueba atlética, ya que son muchas las personas que aprovecha el maratón para realizar turismo y vivir con intensidad las horas de estancia en la ciudad.
El alcalde de Nueva York asegura que el maratón es «algo más que una carrera». Supone una «ocasión de júbilo para las familias, amigos y visitantes que se congregan en la celebración y el apoyo», siendo también un gran motor económico para los hoteles, restaurantes y negocios locales, explica.
Más recaudación
Esta prueba atlética tuvo un impacto económico en 2014 de 415 millones de dólares, pendientes aún de conocer las cifras de esta última edición. Pero a esta cantidad también habría que sumarle otros 22,2 millones (20,3 millones de euros) que el evento deportivo generó en materia de ventas e impuestos de ocupación en la ciudad.
Las imágenes de superación y el gran ambiente que se respira por las calles de Nueva York durante la celebración de estos 42 kilómetros ha hecho que distintas marcas de primer nivel se hayan convencido de lo importante que resulta invertir en el deporte. En la prueba norteamericana destacan compañías como Asics, Tag Heuer, Airbnb o ESPN, que son los grandes patrocinadores de este evento seguido en todo el mundo. Además, el año pasado se alcanzó un acuerdo con la empresa Tata Consultancy Services (TCS) a cambio de que la compañía de información tecnológica dé nombre al maratón, que pasó a llamarse TCS New York City Marathon. El convenio se alargará durante ocho años. La tecnológica se comprometió también a realizar una app para seguir la carrera al minuto.
Aunque no se consigan grandes marcas en esta prueba tiene algo especial que le convierte en única. Sólo así se puede explicar que año tras año continúe batiendo récords de participación con listas de espera interminables.
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