OkSalud
Coronavirus

Estos son los beneficios de cenar pronto, en casa y en los restaurantes

Estos beneficios quizás nos hagan más fácil eso de cenar antes, o acostumbrarnos a las meriendas cenas que se están poniendo de moda.

El coronavirus está cambiando por completo nuestra forma de vivir. No solo nos ha obligado a estar en casa durante meses, sino que también nos hace estar en casa por las noches. Los toques de queda, algo nunca visto y que solo se aplica en algunos países de Europa, obligan a estar en casa de las 22:00 en el mejor de los casos o incluso a las 20:00 para frenar la expansión del virus. Ante esta situación, nuestros hábitos de vida han cambiado por completo, algo tan cotidiano como la hora de cenar se ha visto modificada. Cenar pronto en casa de un amigo o en la propia, para poder sacar al perro antes del toque de queda o directamente querer salir un poco y cenar en un restaurante debe hacerse antes. Este gesto obligado tendrá los siguientes beneficios.

Los beneficios de cenar pronto, en casa y en los restaurantes

El toque de queda obliga a cenar pronto en casa y en un restaurante. Este hecho puede ser beneficioso en muchos aspectos, aunque genera algunas dudas. Los horarios de nuestro día a día, no permiten implantar un modelo con cenas más pronto. Pese al virus, la jornada partida en las empresas o las actividades después de clase de los niños, hacen imposible comer antes, aunque quizás nos ayude un poco cuando hayamos de hacerlo estos beneficios.

Aumenta la capacidad metabólica. Este punto es uno de los que más alegrías genera. Una forma de mantener la forma sin darnos cuenta. La digestión y la quema de grasas que queremos poner en práctica a través de ella se produce de forma más efectiva. Cenar e irse a la cama de inmediato o pasados unos minutos no es nada bueno. Según los expertos si pasan unas 5 horas hasta que nos acostamos damos tiempo al cuerpo para que cumpla con sus funciones. El metabolismo se activa y no se ralentiza como sucede cuando dormimos, al contrario, conseguiremos que las grasas se quemen con mayor facilidad. Por ese motivo, se aconseja comer más y cenar menos, para equilibrar las comidas y perder peso sin darnos cuenta.

Disminuye la presión sanguínea. Si tenemos problemas en este aspecto, podemos conseguir evitar un aumento de presión antes de dormir. El cuerpo descansará mucho más relajado y conseguiremos evitar el molesto insomnio. No poder descansar correctamente no solo incide directamente en nuestras noches, sino también en los días. Se hacen más largos e incluso pueden provocar más de un despiste o problema de salud asociado. Dormir las 8 horas es indispensable para mantener nuestro cuerpo y evitar gran parte de las enfermedades a las que estamos expuestos. El sistema inmunológico necesita recargar también las pilas durante las noches.

El último punto por el que demos cenar lo antes posibles es para mejorar la sensibilidad a la insulina. Estas hormonas implicadas en el control del azúcar y las grasas están menos activas cuando cae el sol, eso significa que cenar antes de que bajen su ritmo ayudará a que sean más efectivas. Es uno de los aspectos en caso de ser diabéticos o tener familiares con esta dolencia que debemos tener en cuenta.

Estos beneficios quizás nos hagan más fácil eso de cenar antes, o acostumbrarnos a las meriendas cenas que se están poniendo de moda. Antes de que caiga el sol o empiece el toque de queda debemos estar en casa. Tener un poco de vida social en un restaurante quizás empieza con una cena antes de que cierren y eso requiere un pequeño esfuerzo para adaptarse a estos horarios. Este gesto, además de disfrutar de una comida maravillosa, puede incidir directamente en nuestra salud.