OkSalud
evidencia científica

Éstas son las enfermedades que se pueden tratar con la musicoterapia

Se consolida como una herramienta eficaz para reducir la ansiedad y el dolor crónico

En una sesión de musicoterapia es posible que se oiga música… se cante, se toque un instrumento o se debata sobre el significado de las letras de ciertas canciones. No requiere una educación musical, pero sí es útil que invervenga un terapeuta especializado.

Según la prestigiosa revista Science, la musicoterapia no consiste ni en aprender a tocar un instrumento sin más ni en escuchar pasivamente. Es el empleo de modalidades musicales elegidas para el paciente, que incluyen escucha, percusión, creación o análisis de letras o composición para el alivio de diversos síntomas relacionados con la salud mental, aunque también se ha probado con éxito en otras situaciones clínicas, como el alivio del dolor oncológico.

Es el mismo planteamiento de Iria Rajal, musicoterapeuta profesional y pedagoga musical, socia de la Asociación Nacional de Profesionales y Autónomos de las Terapias Naturales (Cofenat). Para Rajal son dignas de destacar las aplicaciones de este tipo de terapia en procesos emocionales, neurológicos y de desarrollo personal.

Se refiere al proceso en los siguientes términos: «La musicoterapia es una intervención planificada que puede incluir la escucha activa, el canto, la improvisación musical o incluso la creación de canciones, siempre adaptada a las necesidades de la persona o grupo», explica la experta.

No se necesita saber tocar un instrumento ni tener conocimientos musicales. «Todos tenemos la capacidad de responder a la música o a estímulos sonoro-vibracionales; somos frecuencia, vibración y resonancia y el sonido llega donde las palabras no pueden llegar». Asimismo, se refiere a la voz como nuestra «huella digital sonora, nuestra identidad vibrando».

Beneficios

● Reduce los niveles de ansiedad y cortisol

● Alivia el dolor físico crónico

● Mejora la comunicación en personas con autismo, alzheimer o cualquier caso de diversidad funcional o necesidades de apoyo educativo

● Favorece la conexión emocional en pacientes con depresión o duelo

● Activa la plasticidad cerebral en procesos de rehabilitación neurológica

Rajal es la creadora del método vibria, formación con diapasones terapéuticos adaptada a diferentes profesionales. La metodología ofrece diferentes niveles y se aborda desde un marco teórico-práctico para comprender y saber aplicar frecuencia, vibración y resonancia.

Aplicaciones

Iria lleva muchos años trabajando en diferentes ámbitos musicoterapéuticos. Uno de los campos en los que más ha trabajado es la Musicoterapia en educación especial donde también aplica el método vibria.

Conduce desde años un proyecto en centros educativos acompañando a alumnos con necesidades de apoyo educativo bajo programas de intervención personalizados dentro de los cuales crea recursos sonoro-musicales para el área psicomotriz, el área vocal o del lenguaje, el área afectivo-cognitiva y la interacción social.

«Las sesiones de musicoterapia permiten conectar con emociones profundas, muchas veces inconscientes; nos permite expresar rabia, tristeza, alegría o miedo de forma segura, conectar con nuestros sentidos, reconocer sensaciones, calmar o estimular», ha explicado.

La musicoterapia forma parte de las terapias naturales reconocidas por Cofenat, que promueve un enfoque integrador de la salud. No se trata de sustituir otros tratamientos médicos, sino de complementarlos y potenciar sus efectos, trabajando cuerpo, mente y emociones de forma conjunta, indica la experta.