Un día para dar la vuelta a los mensajes tóxicos sobre la depresión
La campaña "Red Flags de la Depresión" en redes sociales se basa en la detección de comentarios negativos ("red flags" o "banderas rojas") para convertirlos en mensajes veraces que sirvan de apoyo a quienes padecen la enfermedad
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En redes sociales se conocen como ‘red flags’ los comentarios tóxicos o irrespetuosos. Con motivo del Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, el 13 de enero, puede seguirse en Twitter, LinkedIn y Facebook el perfil Rethink Depresión (Replanteando la Depresión) que tiene como objetivo mejorar el conocimiento de esta enfermedad y reducir el estigma que tantas veces acarrea.
Este año, la jornada de divulgación tiene aún más importancia porque los dos años de pandemia han tenido un impacto enorme sobre la salud mental. En el caso de la depresión, los expertos calculan que España ha pasado de un 7 por ciento a un 20 por ciento de población afectada en este periodo.
‘Red flags’
Las banderas rojas son comentarios que reflejan falsas creencias, mitos o ideas preconcebidas acerca de la enfermedad que no tienen nada que ver con la realidad. Son fruto del desconocimiento que todavía existe en torno a la depresión, una tendencia a banalizarla que acaba perpetuando el estigma social de quienes la padecen. Incluso pueden fomentar la propia percepción de los pacientes, que se culpabilizan o se avergüenzan. Los expertos lo llaman auto-estigma. Ejemplos de banderas rojas: pensar que la depresión es solo tristeza, que se debe a la debilidad de carácter, o que es algo que solo depende de uno mismo. En la campaña se les va a dar la vuelta, sustituyéndolas por mensajes veraces sobre la depresión que puedan servir de apoyo a todas las personas que viven con la enfermedad, brindándoles comprensión, escucha activa, empatía y acompañamiento.
También puede ser una herramienta de ayuda para las familias y entorno de los pacientes. Además, se anima a los usuarios a compartir las ‘red flags’ que han escuchado o vivido sobre la depresión.
Rosa Molina, Psiquiatra en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid y Presidenta de la Sección de Neurociencia Clínica de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, además de activa profesional en redes sociales considera que «las enfermedades de salud mental, en general, y la depresión, en particular, son trastornos complejos que requieren de un abordaje multidisciplinar; la sociedad necesita aprender a distinguir lo que es un trastorno como la depresión de un estado emocional de tristeza normal».
En cuanto al papel positivo que pueden jugar las redes sociales en la divulgación y mejor conocimiento de la salud mental, la psiquiatra considera que «pueden ser un aliado para difundir información rigurosa y llegar a la gente de forma rápida, captando su atención y con mensajes potentes que es difícil transmitir de otra manera. La población recurre a las redes, también para buscar información sobre salud mental, y esto es una oportunidad que los profesionales no debemos desaprovechar».
La depresión no es tristeza
Depresión y tristeza no son lo mismo. Incluso hay depresiones que cursan sin ella. La depresión es una enfermedad con síntomas afectivos, cognitivos y físicos. Una enfermedad, no debilidad personal ni culpa de nadie.
Susana Gómez-Lus, directora médico y de acceso al mercado de Lundbeck Iberia, que ha puesto en marcha la campaña, asegura que «reconocer y conocer la depresión es un primer paso fundamental para salir de ella. Nuestro compromiso con la salud del cerebro nos lleva a impulsar iniciativas como esta, con el fin de combatir falsos mitos todavía hoy muy arraigados en nuestra sociedad, que pueden dificultar la búsqueda de ayuda profesional para lograr un diagnóstico precoz y un tratamiento personalizado».
La depresión es una enfermedad frecuente. A escala mundial, aproximadamente 280 millones de personas viven con esta condición. Representa, además, una de las principales causas de discapacidad en adultos y adolescentes en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Afecta más a mujeres que a hombres.
La OMS recuerda que existen tratamientos eficaces para la depresión, ya sea leve, moderada o grave.