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¿Cuántos tipos de medicamentos existen?

A lo largo de nuestra vida tomamos diferentes tipos de fármacos, para diferentes afecciones. Pero ¿cuántos tipos de medicamentos existen?

  • Francisco María
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Hay distintos tipos de medicamentos, así como múltiples maneras de clasificarlos.  La forma más elemental para listar los fármacos es a partir de su forma o presentación. De manera general se dividen en líquidos, sólidos, orales, tópicos e intravenosos, aunque esta clasificación es esencialmente superficial. En ella van incluidos las pastillas y las cápsulas blandas; así como polvos y granulados.

También se tienen en cuenta los supositorios y óvulos, destinados para introducirse en el recto o en la cavidad vaginal, respectivamente. Por otro lado, dentro de las medicinas de aplicación tópica se consideran ungüentos, cremas, emplastos, pomadas y lociones.

Las fórmulas en suspensión son mezclas de medicamento líquido, pero que no se diluyen en reposo. Hay que saber que estas soluciones están conformadas por dos o más sustancias químicas, que al entrar en contacto con agua se diluyen en forma homogénea. La lista de tipos de medicamentos según su forma la completan colirios, enemas, inhaladores, ampollas, jarabes, tinturas, mucílagos y elixires.

Por su función

Esta clasificación es la más usada. Permite conocer el fin de una medicina a partir del adjetivo que lleva adosado junto a su denominación comercial. Aliviar dolores, reducir la temperatura corporal o contrarrestar los efectos de reacciones alérgicas, son las necesidades más comunes.

Entre los medicamentos más conocidos aparecen los analgésicos, remedios destinados para contrarrestar dolores físicos. Estos a su vez se dividen en opiáceos (morfina) y no opiáceos (paracetamol) Dependiendo de la causa de la afección, pueden acompañarse con antiinflamatorios. Los antialérgicos y antidepresivos no dejan lugar a dudas sobre el propósito que se persigue con su formulación.

Para el aparato digestivo hay hasta tres tipos de medicinas. Los antiácidos, cuya función es contrarrestar la acidez gástrica, los antidiarreicos y los laxantes; estos dos últimos recetados con objetivos diametralmente opuestos.

Los antipiréticos (para bajar la fiebre), antitusivos (ante cuadros severos de tos) y mucolíticos (contra la mucosidad) tienen usos también específicos. Finalmente están los antiinfecciosos y los antivirales, fármacos que a su vez cuentan con su propia subdivisión: antivirales, antiparasitarios, antibióticos (para hacer frente a bacterias) y antifúngicos (contra los hongos).

Tipos de medicamentos, según sus condiciones de venta

Esta clasificación se divide en dos categorías generales: con o sin receta médica. Los de libre venta son todos aquellos que pueden adquirirse en una farmacia sin que para ello se requiera de una receta. Los analgésicos no opiáceos entran en esta categoría.

Por otro lado, las medicinas cuya compra se realiza inexorablemente con una orden sellada y firmada por un médico colegiado, son de uso delicado. Bien por los efectos secundarios que producen (analgésicos como la morfina, por ejemplo), o porque su uso indiscriminado se ha convertido en un problema de salud (antibióticos).