Receta de pestiños de anís, canela y sésamo
¿Te gusta la repostería casera? Apunta esta receta de pestiños de anís, y disfruta cocinando en familia. Aquí te dejamos el paso a paso, pruébalo.
Los pestiños de anís, canela y sésamo pueden endulzar tus tardes. El pestiño es un dulce frito tradicional de Andalucía aunque también se prepara en otras regiones. Este dulce entra en la categoría de las frutas de sartén, que son elaboraciones ligeras de masa que se fríen para ser preparadas. El fuerte sabor a ajonjolí es una de las características que diferencia a esta receta de otras similares. Además, la masa se forma como un cuadrado cuyas esquinas se pliegan hacia el centro. No obstante, existe una diversidad de formas que se le puede dar a la masa antes de su cocción. Este es un dulce bastante popular en Navidad e incluso Semana Santa.
Desde el punto de vista nutricional, los pestiños son una fritura, por lo cual es recomendable preparar solo de vez en cuando con aceite vegetal. Sin embargo, esta propuesta puede elaborarse sin incorporar el azúcar, lo cual es bastante ventajoso. Por todo ello, esta preparación puede ser una merienda ocasional que complemente la dieta del día. A continuación, verás cómo preparar uno de los secretos mejor guardados de Andalucía.
Ingredientes:
- 750 gramos de harina de trigo
- 250 miligramos de aceite de oliva
- 250 ml de vino blanco
- 10 gramos de canela
- 15 gramos de anís en grano
- 15 gramos de semillas de sésamo
- 1 Limón
- 1 naranja
- Sal
- Miel
- Agua
Cómo preparar pestiños de anís, canela y sésamo:
- Rallar las cascarás de limón y naranja.
- Calentar un vaso de aceite en una sartén y freír las cascarás de naranja y limón.
- Dejar enfriar y colar el aceite de las cascaras.
- Calentar en otra cazuela el vino con un poco de sal sin dejar que el alcohol hierva.
- Tostar durante un minuto las semillas de anís y sésamo en la sartén con vino y sacarlas. Reservar.
- Colocar la harina de trigo en un bol y mezclar con la canela, el aceite colado y las semillas tanto de anís como de sésamo. Amasar con las manos.
- Incorporar a la masa el vino de forma progresiva y continuar amasando. Dejar reposar durante 30 minutos.
- Estirar a masa con un rodillo y cortar cuadros.
- Unir dos de las puntas de cada pestiño para formarlos en rollos.
- Mezclar en un recipiente un poco de agua y miel para formar una mezcla acaramelada.
- Freír cada pestiño con abundante aceite hasta dorar.
- Sacar los pestiños, pasar por papel absorbente para remover el exceso de aceite y rebozar en el agua con miel.
La masa de los pestiños suele ser bastante dinámica y se pueden incorporar otros ingredientes para variar. A esta se le puede añadir por ejemplo un poco de almendras trituradas.
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