Javier Cárdenas no entiende cómo puede quedar en libertad el violador sin rostro tras haber atacado a diez mujeres. Ello, tras un trabajo policial de casi un año para dar con el también conocido como violador de Tinder.
El procedimiento que seguía, como explica el presentador de Levántate OK, era quedar con mujeres a través de la red social mencionada y proponer encuentros a oscuras en habitaciones de hoteles, asegurando que se trataba de «una experiencia sensorial». Después, aseguraba que encendería las luces para conocerse, pero ese momento nunca llegaba. Cometía la violación, robaba lo que podía y huía del lugar.
Esto lo hizo, al menos, con diez mujeres en Madrid hasta que una mujer, a través de un reloj con luz, logró verle la cara. Entonces, se dio cuenta de que no era el mismo que decía ser en Tinder. Al verse descubierto, le propinó una paliza y la agredió sexualmente en repetidas ocasiones.
Gracias a esta mujer, la Policía dio con una pista que permitió su detención. Sin embargo, después de todo lo ocurrido, el violador -vecino de Móstoles- ha quedado en libertad con cargos. «¿Cómo se entiende que un juez no mande a prisión inmediatamente a alguien que ha cometido violaciones múltiples y agresiones», se pregunta Javier Cárdenas al respecto.
