Opinión

El salto cualitativo entre Zarzuela y Moncloa para buscar salida a la crisis del Rey Emérito

Las declaraciones del Presidente del Gobierno Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa, al final de su comparecencia con el Primer Ministro italiano Giussepe Conte, marca el inicio de lo que podría ser la búsqueda de una solución pactada que dé salida a la crisis institucional que se ha instalado en el organismo de la Corona, debida al presunto comportamiento irregular del anterior monarca en materia fiscal y económica.

Al calificar las informaciones sobre el Rey Juan Carlos de “inquietantes y que nos perturban a todos, a mí también”, ya que le involucran presuntamente en actividades opacas ante el fisco español y de ser sospechosas de blanqueo de capitales, el Jefe del Ejecutivo ha dejado atrás la estrategia de no entrar en el meollo de las acusaciones que se ciernen sobre don Juan Carlos y dejar claro su rechazo a esas actividades. Al mismo tiempo, Pedro Sánchez ha mostrado su apoyo a la decisión de la Casa Real de poner distancia con el anterior Jefe del Estado, en clara alusión al comunicado dado a conocer por el Palacio de la Zarzuela el pasado 15 de Marzo.

La posición de Moncloa es claramente un cambio cualitativo respecto a la mantenida hasta ahora por el Gobierno, que se limitaba a decir que era un asunto que estaba en manos de la justicia, por lo cual había que respetar el curso de la investigación de jueces y fiscales. El vuelco es total ya que el Presidente del Gobierno ha elogiado que los medios de comunicación “no miren a otro lado” y también ha afirmado que “la Justicia está actuando”, lo que supone en ambos casos  la aprobación total del Ejecutivo a que se aborde directamente la situación del Rey Juan Carlos.

Es lógico, por otra parte, que una vez que se ha terminado el confinamiento decretado por el Estado de Alarma y que los documentos incriminatorios acerca del Rey Juan Carlos anden ya por todos los medios de comunicación, se aborde esta espinosa situación que se ha vuelto de alto riesgo para la estabilidad del actual Jefe del Estado Felipe VI. La permanencia del anterior monarca en las dependencias de la sede de la Jefatura del Estado es algo que no es muy compatible con la determinación de don Felipe de poner distancia con la actuación presuntamente irregular de su padre. El retirarle la asignación económica a don Juan Carlos así como renunciar por adelantado a lo que pudiera corresponderle en herencia son decisiones muy duras que el actual Rey no dudó en tomar en su momento a pesar de que eso implicaba aceptar la culpabilidad de su padre.

Frente a la tormenta mediática que inunda portadas, tertulias y digitales en la red, los Reyes Felipe y Letizia siguen fieles en su gira por localidades de todas las Comunidades Autónomas, a la tarea de dar ánimo y apoyo a los ciudadanos en su tarea de reconstrucción y retorno a una cierta normalidad. Y desde el Palacio de la Zarzuela remiten al discurso de proclamación de Felipe VI hace seis años y al comunicado del 15 de Marzo en el que se determina con claridad como entiende el actual Rey el ejercicio de su función ante los ciudadanos.