Opinión

Es lo que tiene blanquear al monstruo, Pedro Sánchez

El resultado de la encuesta de Data10 para las elecciones vascas que ofrece OKDIARIO demuestra a las claras que la estrategia de blanqueamiento de los proetarras de Bildu llevada a cabo por el sanchismo ha surtido efecto entre los votantes socialistas, pues uno de cada tres prefiere pactar con la formación de Otegi, que sería la fuerza vencedora en escaños en los próximos comicios autonómicos, con 28 escaños, uno más que el PNV. El PSOE, que conseguiría 10, tendría la llave de la gobernabilidad, mientras que el PP obtendría 7. Lo que significa que Sánchez tendría que decantarse por PNV o Bildu, una encrucijada que en caso de que la victoria de los proetarras fuera suficientemente clara complicaría, y mucho, la decisión del PSOE. Y es que resulta significativo y grave que un relevante porcentaje de los votantes de un partido que durante décadas pagó con su sangre su defensa de la democracia prefiera pactar con los herederos políticos de una banda de asesinos.

Es un dato tan estremecedor como revelador de que el PSOE ha vendido su alma al diablo y que su electorado ya no ve a Bildu como lo que es, sino como una formación perfectamente homologable desde un punto de vista demográfico. Tremendo. De eso tiene la culpa Pedro Sánchez y su falta absoluta de compromiso moral. Bildu está en condiciones de ganar las elecciones vascas por vez primera en la historia y un tercio de los votantes socialistas desearía que su partido otorgara a Otegi el Gobierno vasco. Eso, con independencia del resultado final, es la prueba del nueve de que el socialismo ya no está en las coordenadas de defensa de los valores democráticos encarnados en el constitucionalismo, sino en una mera estrategia de ocupación del poder al precio que sea.