Prevención de incendios

Aragón aplica un modelo propio de medición de combustible para prevenir los incendios forestales

Los Agentes de la Protección de la Naturaleza realizan prospecciones para calcular la humedad de la vegetación, que determina la inflamabilidad y la combustibilidad de la masa forestal

  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

Aragón aplica un modelo de medición de combustible propio para prevenir los incendios forestales y crear un verdadero sistema de gestión del riesgo del incendio.

Predecir el comportamiento y los efectos del fuego es una de las tareas esenciales de los dispositivos de incendios y, por este motivo, la Dirección General de Gestión Forestal trabaja en un sistema de predicción validado que conjuga distintos modelos de combustibles, basados en modelos matemáticos.

El combustible en los incendios forestales es aquella parte de la planta que está dispuesta a arder. Existen combustibles vivos, tales como hierbas, matas, arbustos y árboles y combustibles muertos: tocones, ramas, caída, hojarasca…

Modelización y prevención

El director técnico de Incendios Forestales, Rafael López del Río, explica que el modelo de combustible de Aragón «es una modelización de la realidad que nos ayuda a la gestión de los incendios forestales de dos maneras. Al igual que los modelos hidrológicos ayudan a prevenir y gestionar las inundaciones, los de combustible nos ayudan a gestionar la identificación del riesgo del incendio forestal y la gestión preventiva de las masas forestales para minimizar ese riesgo».

En resumen, se ha creado y aplicado un modelo de combustible que «ayuda a gestionar la identificación del riesgo y la gestión preventiva de las masas forestales», explica el director técnico. Así, la comunidad aplica un modelo que recoge supuestos de distintos marcos de referencia: el norteamericano, Rothermel, el de Scott y Burgan y Prometheus de Europa.

Agentes inflamables

La gestión es diseñada y dirigida por técnicos y Agentes de Protección de la Naturaleza y ejecutada por las cuadrillas en su fase preventiva. Las principales directrices son reducir la cantidad de combustible fino muerto y mejorar el estado hídrico de los combustibles vivos, realizando la competencia y fomentando las especies mejor adaptadas a la sequía, así como las menos inflamables.

La inflamabilidad de los incendios forestales es la facilidad del combustible forestal para arder bajo la acción calorífica de un foco térmico. Los aceites o resinas adoptan un papel relevante en la combustión, trabajando el punto de inflamación.

Dependen, por tanto, del contenido de volátiles, tamaño, contenido de humedad, densidad y poder calorífico, continuidad, compacidad, forma y tamaño.

Medición de la humedad de la vegetación forestal por parte de un Agente de Protección de la Naturaleza (Foto: Gobierno de Aragón)

Prospecciones sobre el terreno

En este sentido, en Aragón se trabaja en las prospecciones sobre el terreno para la medición de humedad de la vegetación forestal que determina la inflamabilidad y la combustibilidad de la masa forestal. Los Agentes de la Protección de la Naturaleza realizan seguimientos del contenido de la humedad de la vegetación forestal de cara a mejorar la alerta de peligro de incendios forestales.

Con el modelo de combustible se pretende establecer un sistema de gestión de riesgo con el que poder actuar en las distintas áreas involucradas en la operativa de incendios, capacitación y formación, planificación y prevención, lucha operativa y post-análisis del riesgo.