6 tecnologías que te salvan la vida al volante

Las tecnologías en el mundo del automóvil evolucionan a una velocidad de infarto. La obligación de crear productos innovadores y sorprendentes y la particular carrera entre fabricantes de vehículos hace que los conductores nos beneficiemos de muchas más ventajas a la hora de conducir de las que podríamos disponer hace sólo unos años.

Hoy queremos poner el foco de atención precisamente en la evolución de los sistemas seguridad de nuestros coches para conocer, más allá de los elementos tradicionales como pueden ser airbags, cinturón de seguridad o control de estabilidad, cuáles son las últimas tecnologías que contribuyen a evitarnos un disgusto al volante en un momento dado. Estos son seis dispositivos o elementos de seguridad modernos que salvan vidas en la carretera.

Detector de fatiga

Muchas veces hemos escuchado que un accidente de tráfico se produjo porque el conductor se quedó dormido al volante. El detector de fatiga es una tecnología más o menos reciente cada vez más habitual en los coches modernos.  Estos sistemas analizan las actitudes del conductor y de sus manos al volante y en muchos caso son capaces de estudiar el comportamiento de los ojos. Esto sumado a la duración del trayecto y la hora del día sirve para calcular el índice de fatiga. Si el sistema lo cree conveniente, avisará con una imagen y una señal sonora al conductor para que realice una parada y descanse.

eCall

La llamada automática de emergencia será obligatoria en todos los coches nuevos a partir de 2018 y es sin duda el elemento que mayor número de vidas puede salvar, en este caso una vez producido el accidente. Su funcionamiento es sencillo a la vez que efectivo. Un botón instalado normalmente cerca del retrovisor central alertaría sólo con pulsarlo a los servicios de emergencia en caso de accidente. Así conocerían al instante nuestra posición exacta mediante GPS.

Cambio de carril involuntario

Un despiste ocasionado muchas veces por una pequeña distracción o por la fatiga al volante mencionada anteriormente. Este sistema de seguridad comienza a ser muy habitual en los coches nuevos y emplea diferentes sensores para detectar que el vehículo comienza a invadir el carril contiguo o incluso el contrario. Normalmente suele emitir una señal sonora y un aviso en el cuadro de mandos para alertar al conductor. Algunos modelos llegan a corregir con suavidad la trayectoria del volante para devolver al automóvil a su carril.