Los Reyes Magos sustituyen sus camellos por tres Ford Edge

La época navideña que nos ocupa nos suele traer una serie de actos caritativos que solamente merecen aplauso. Una marca que siempre suele estar involucrada en ellos es Ford, que ha sido responsable una vez más de que los Reyes Magos de Oriente hayan adelantado su tradicional visita a todos los niños para acercarse a la Fundación Bobath. La sede de esta fundación, situada en el norte de Madrid, se ha llenado de sonrisas, regalos y buena voluntad con la llegada de los magos al volante de tres Ford Edge, que para la ocasión han sustituido a los tradicionales camellos, que están ultimando su puesta a punto para la dura noche de trabajo del próximo 6 de enero.

Enmarcada dentro del conjunto de acciones de voluntariado y RSE que Ford España realiza a lo largo del año, la visita a la sede de la Fundación Bobath ha contado con la participación de una veintena de trabajadores de la compañía, sumando los Reyes Magos y sus pajes, que han hecho entrega de los regalos preparados con cariño por padres, dirigentes de la propia fundación y Ford. Se trata, según señalan los trabajadores que participan, de una de las acciones de voluntariado más gratificantes de cuantas se realizan durante el año.

Ford y la Fundación Bobath cuentan con una larga relación por la que ésta ha participado en las dos últimas ediciones de las 24 horas Ford, al mismo tiempo que la marca del óvalo ha participado en varias de las actividades que organizan a lo largo del año para recaudar fondos, mediante el programa de vehículos adaptados Ford Adapta.

La Fundación Bobath se dedica a la atención integral de niños con parálisis cerebral o alteraciones de desarrollo gravemente afectadas, y niños con escasos recursos económicos. Cuenta con unas instalaciones que incluyen en la actualidad dos centros, uno para los más pequeños y otro para los que ya se encuentran en edad adulta, donde les dan atención especializada según las necesidades de cada uno. El último proyecto en el que se han embarcado es la construcción de un área residencial en el que los menores podrían hacer noche y recibir las atenciones que necesita cada uno por personal especializado.