Bentley también da marcha atrás con el coche eléctrico: venderá híbridos enchufables hasta 2035

La marca se suma a otras que ya han revisado sus objetivos como Mercedes-Benz o Ford

  • Andrea Aguado
  • Redactora de economía y coordinadora de OKMOTOR. Amante de las cuatro ruedas y la industria. Antes en informativos de Radio Televisión Castilla y León.

Bentley da marcha atrás con el coche eléctrico y se suma a Mercedes-Benz y Ford. El fabricante automovilístico de coches de lujo británico ha retirado formalmente la hoja de ruta de electrificación de su gama, que bautiza ahora como Beyond100+, y pospone hasta 2035 su objetivo de vender únicamente coches eléctricos, cinco años más tarde de lo previsto.

El grupo automovilístico ha avanzado este jueves que ya trabaja en su primer coche de batería que lanzará al mercado en 2026 y que será un «SUV urbano de lujo» al que le seguirán varios lanzamientos de un modelo híbrido enchufable o totalmente eléctrico cada año durante la próxima década.

De esta manera, la compañía seguirá vendiendo vehículos híbridos enchufables hasta mediados de la próxima década y no hasta 2030, como tenía previsto en un primer momento, dado el escaso interés de los clientes sobre este tipo de coches y la ralentización de la demanda en los distintos mercados europeos en general.

Bentley y el coche eléctrico

El consejero delegado de Bentley, Frank-Steffen Walliser, ha asegurado que sus objetivos podrían ser modificados en función de la demanda, ya que «algunas regiones» se están electrificando «más lentamente».

«Para ser honesto, no hay mucha demanda -de vehículos eléctricos a batería- por parte de los clientes actuales de Bentley», ha confesado el consejero delegado de la firma británica.

A día de hoy, el grupo vende los modelos Continental GT Coupé, Convertible y Flying Spur con un sistema de propulsión híbrido enchufable después de haber anunciado el cese de la producción del motor W12 en la planta británica de Crewe tras 20 años de fabricación ininterrumpida.

Las ventas globales de vehículos de Bentley cayeron un 27% hasta comercializar 7.380 unidades en los primeros nueve meses, en comparación con las más de 10.000 comercializaciones que se registraron en el mismo periodo del año anterior. Una cifras que provocaron que la marca registrara un beneficio operativo de 300 millones de euros en los nueve primeros meses, lo que se traduce en un 40% menos respecto al año anterior, por un menor volumen de las ventas.

Otras marcas

No es la única marca que ha abandonado sus objetivos con el coche eléctrico. Hace tan sólo unos meses, Mercedes-Benz confirmó que seguirá produciendo motores de combustión más allá de 2030. Un planteamiento con el que el fabricante automovilístico alemán se aleja de sus ambiciosos objetivos en materia de electrificación programados para esta década ante la ralentización de la demanda en el mercado europeo ante la reducción de los incentivos de los distintos gobiernos y la escasa evolución de la infraestructura de recarga en las carreteras.

Mientras, otras marcas de origen europeo, como es el caso de Volvo continúan apostando por la electrificación de su flota tras poner fin a la producción de coches propulsados con motores de combustión a pesar de la ralentización de la demanda en los distintos mercados del Viejo Continente, que ha provocado un descenso importante de las matriculaciones de este tipo de motorizaciones en lo que va de año, así como por la entrada de nuevos competidores procedentes de China.