Tips para comprender el lenguaje corporal de tu gato

Para entender a tu gato, debes saber interpretar sus comportamientos y, fundamentalmente, su lenguaje corporal.  La posición de las orejas y el movimiento de la cola, por ejemplo, son las que indican casi con exactitud el estado de ánimo del animal. El lenguaje corporal del gato expresa felicidad, enojo, ansiedad, estrés o miedo, y tiene un maullido en particular para cada uno de ellos.

El complejo lenguaje corporal de los gatos

El lenguaje corporal de los perros es muy diferente del de los gatos, pues los signos corporales de las dos especies son muy distintos. Los gatos inhiben sus emociones de forma notable y es relativamente más difícil detectar, por ejemplo, si está enfermo.

Cabeza

La cara de tu gato dice mucho de su estado de ánimo. Si está inclinada, puede estar sugiriendo miedo e incluso ira; cuando la cabeza está en alto indica bienestar y confianza.

Ojos

Cuando tu gato entrecierra los ojos, como cuando lo acaricias, es porque se siente relajado y tranquilo. Si abre demasiado los ojos y se muestra alerta, puede sentir curiosidad o miedo por algo.

Cola

La cola de tu gato puede indicarte con bastante precisión su estado de ánimo. Si ves que la cola está demasiado baja, puede estar deprimido o enojado.

Si la cola se pone rígida o temblorosa, está indicando emoción o placer, en tanto que, si se arquea, es solo por curiosidad. Cuando la cola está rígida y hacia arriba es un signo de ira, y si además se mueve rápidamente, seguro que tu gato está irritado.

Orejas

Las orejas de los gatos tienen 25 músculos y son extremadamente expresivas. Cuando tu gato está pendiente de todo lo que sucede a su alrededor, mueve sus orejas constantemente.

Si las orejas se encuentran hacia arriba, es una situación normal; si en cambio se inclinan hacia los lados o hacia atrás, y además entrecierra los ojos, está asumiendo una posición defensiva u ofensiva.

Comportamientos y expresiones corporales del gato

Existen algunos comportamientos de los gatos que suelen ser malinterpretados, particularmente si comparas el lenguaje corporal de los gatos con el lenguaje de los perros.

Cuando tu gato se recuesta y te muestra su vientre está demostrando confianza, bienestar y relajación, aunque eso no signifique una invitación a acariciarle el vientre. Probablemente, el gato rechace las caricias en esa zona tan sensible.

Si en algún momento ves a tu gato agacharse, enderezar sus orejas y abrir grandes los ojos, es que algo está preocupándolo y se prepara para empezar a correr o cambiar de posición.

Cuando acercas tu mano y el gato roza su cara en ella, o se incorpora y te toca con sus patas delanteras, está demostrando su afecto, también cuando se frota en tus piernas. Esta es una señal clara de que quiere que le demuestres tu cariño, ya sea con palabras o con unas caricias.

¿Cuál es el comportamiento en que has visto reflejado tu gato? Seguramente todos, o muchos de ellos. Déjanos tu comentario y comparte estos tips para que todos puedan comprender mejor a sus mascotas.