Internacional

Zapatero sugiere desde Venezuela que la UE debe reconocer las elecciones fraudulentas de Maduro

El ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha viajado este domingo a Venezuela para apoyar las elecciones convocadas por el régimen de Nicolás Maduro. Desde allí ha pedido a la Unión Europea que realice «una reflexión serena y sosegada» sobre su no reconocimiento de unas elecciones que la oposición venezolana denuncia como otro fraude más de la narcodictadura de Maduro. Asimismo el ex dirigente socialista ha instado a la comunidad europea a que se «separe» de la política de la Administración Trump.

El que fuera jefe del Ejecutivo español se encuentra en Venezuela en calidad de observador internacional en las elecciones a la Asamblea Nacional venezolana que se celebran este domingo. En una rueda de prensa, Zapatero ha recordado que «la diplomacia se basa en la resolución pacífica de los conflictos» y ha pedido que la UE haga una reflexión tras los comicios y evalúe para qué ha servido «la política de sanciones y no reconocimientos». Esto, a su juicio, «nos puede llevar al mayor absurdo de la historia del derecho internacional».

Por ello, ha reclamado a la Unión Europea que hay que «comprometerse» con Venezuela y «hablar con todos», además de separarse de la política de Trump sobre el país, que ha acentuado, en su opinión, la crisis económica y social. «Que sea crítica y exigente en las reglas democráticas. Al máximo. Pero no forma parte de la esencia de la UE el no mantener una posición equilibrada, rechazar sanciones que hacen daño a los ciudadanos y no intentar el máximo acuerdo posible», ha dicho.

El expresidente del Gobierno español ha pedido también a la oposición política en Venezuela que han decidido no concurrir a las elecciones legislativas que «reflexionen y exijan» y ha valorado la jornada electoral como «un paso adelante» que significa «el principio del final de los peores momentos que ha vivido» el país.

Zapatero ha recordado que la «mesa de diálogo nacional» ha sido la «única referencia estable» que ha promovido cambios en el Consejo Nacional Electoral. «Sabemos que ya no sirve la imposición ni las sanciones. Solo sirven el diálogo y los votos, el encuentro y la deliberación democrática. No hay otro camino», ha expresado Zapatero, quien ha destacado que la jornada electoral es «un paso adelante» y «el principio del final de los peores momentos que ha vivido Venezuela», de un «conflicto total» y con «unas sanciones injustas e incomprensibles».

«Es inmoral»

Esta visita para refrendar una farsa electoral ha sido duramente criticada este domingo, Día de la Constitución, por Pablo Casado. El líder del PP ha calificado de «inmoral» la visita de Zapatero: «Las elecciones en Venezuela son una farsa, un insulto a los 17.000 asesinados, violados y torturados por la dictadura de Maduro», ha señalado Casado en un mensaje publicado en la red social Twitter.

Zapatero, amigo de Maduro

No será ni la primera ni la última vez que Zapatero se pliega a los deseos de Maduro de legitimiar su régimen mediante ‘observadores independientes’. El pasado mes de febrero, Zapatero viajó a Caracas para reunirse con la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, y con el propio Maduro.

En ese encuentro, Zapatero fue recibido como un jefe de Estado y agasajado por el régimen chavista por su «firme disposición a abrir caminos para el diálogo y el entendimiento franco en los distintos sectores de nuestra Patria».

Sin embargo, esos «distintos sectores» de los que hablaba Maduro no se materializaron en ese viaje: Zapatero no se reunió con ni un sólo representante de la oposición.

Sólo unos meses más tarde, la oposición venezolana emitiría un comunicado recordando que Rodríguez Zapatero «no es un intermediarioni un mediadorni un hombre neutral». Así lo sostuvo el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, en una carta firmada por toda la oposición.  Le calificaron de mero «aliado» de Nicolás Maduro y de legitimador de su régimen, que esta misma semana ha lanzado una advertencia a la población civil: «El que no vote, no come», ha dicho Diosdao Cabello, número 2 de la narcodictadura.