Internacional

Unas grabaciones inéditas desmontan la narrativa de la izquierda sobre el asalto al Capitolio

La Policía del Capitolio facilitó en buena manera la entrada de los manifestantes a los edificios legislativos de EEUU el 6 de enero de 2021 en lo que se conoce como el asalto al Capitolio. Nuevas grabaciones inéditas muestran cómo la Policía del Capitolio nunca detuvo a Jacob Chansley, también conocido como el ‘chamán de QAnon’, a quien ayudaron durante en los accesos y al que trataron prácticamente como si fuesen guías turísticos.

Sin embargo, expresiones como golpe de Estado, insurreción o ataque mortal fueron algunos de los calificativos con los que el Partido Demócrata en EEUU y su coro mediático se refirieron a dicho asalto al Capitolio de decenas de estadounidenses tras acudir a una manifestación en apoyo al entonces presidente, Donald Trump, y a las acusaciones de fraude en las elecciones presidenciales celebradas dos meses antes. Ahora toda esa narrativa de la izquierda política repetida hasta la saciedad ha empezado a resquebrajarse con la revelación de videos inéditos de aquel día que habían permanecido censurados hasta la llegada de los republicanos a la Cámara de Representantes.

Los videos, procedentes del circuito de cámaras de seguridad del Congreso, muestran unas sorprendentes e inesperadas imágenes donde, además de los policías del Capitolio que estuvieron acompañando en buena parte de su recorrido a Jacob Chansley vinculado con QAnon, movimiento asentado sobre la teoría de que existe en EEUU y otros países un ‘estado profundo’ más allá de los líderes democráticamente elegidos que rigen los destinos de cada territorio, también se puede ver a otros policías en las puertas del Senado que siguieron a su lado. Los policías acompañaron a Chansley a varias entradas de la Cámara, la mayoría de las cuales estaban cerradas hasta que llegaron a una que sí permanecía abierta y le dio acceso al hemiciclo.

Las imágenes emitidas por el presentador Tucker Carlson de Fox News corresponden a las más de 40.000 horas de grabación inédita que el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, cedió al periodista para su emisión. Precisamente la reacción de los demócratas y de los medios alineados a la izquierda fue la prevista. Además de solicitar la entrega de las imágenes, acusaron a McCarthy de poner en riesgo la seguridad de las instituciones al mostrar públicamente los accesos del edificio.

Entrevistado por el periodista de Fox News mientras cumple una pena de prisión de cuatro años por «obstrucción de procesos oficiales», Jacob Chansley aseguró estar arrepentido de haber confiado en la respuesta policial: «Cuando vimos que los agentes nos jaleaban, pensé que estábamos haciendo lo correcto». Por su parte, en un comunicado, la Policía del Capitolio manifestó que «uno de nuestros agentes trató de desescalar la situación porque estábamos sobrepasados», aunque no explicaron cómo fue posible que Chansley, desarmado, se paseara delante de otra decena de agentes del orden y éstos nos hicieran nada para detenerle. «Jacob Chansley se creyó que los policías eran sus aliados», aseguró Carlson.

Sin embargo, el ‘chamán de QAnon’ ha sido identificado por el relato de la izquierda como el verdadero rostro de lo sucedido aquel día, un ‘conspiranoico’ ataviado con un estrambótico disfraz que lideró la violenta insurrección para derribar la democracia estadounidense.

Policía fallecido

Otra de las imágenes reveladoras del 6 de enero se refiere a las del policía Brian Sicknick, fallecido al día siguiente, y por cuya muerte responsabilizaron los políticos de la izquierda a los manifestantes. Sicknick aparece en los videos sin recibir agresión alguna y sin mostrar signos extraños o anormales. «Controlando las imágenes que ustedes pudieron ver de aquel 6 de enero, ellos controlaron cómo querían que ustedes entendieran lo ocurrido. Les pudieron mentir sin que llegaran a percibirlo», aseguró Carlson durante la exhibición de las imágenes. Añadió que «las mentiras tuvieron un propósito, el de crear un pretexto para aprobar medidas contra los oponentes al modelo unipartidista de Washington». Tras la emisión de las imágenes, el ex presidente Donald Trump solicitó la liberación de los detenidos por los hechos y la repetición de los juicios con la aportación de las nuevas pruebas.