Putin afirma que prefiere a Biden antes que a Trump y lamenta no haber atacado Ucrania antes

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha reconocido este miércoles que prefiere que gane las elecciones presidenciales de Estados Unidos Joe Biden antes que Donald Trump, debido a que el mandatario demócrata es «más predecible». Además, durante su intervención se ha lamentado de no haber atacado Ucrania antes.

A juicio de Putin, Biden «es un político de la vieja escuela» y ha añadido que Moscú trabajará con cualquier líder estadounidense que se elija en las elecciones de noviembre. Putin, que lleva al frente de Rusia desde 1999, tiene previsto ganar las elecciones presidenciales en pocas semanas después de que las autoridades rusas eliminaran cualquier oposición seria.

Los comentarios de Putin sobre Biden son un elogio poco frecuente del líder del Kremlin, que ha tenido siempre buenas palabras para describir a Trump. En un mitin de campaña el miércoles por la noche, Trump pareció aceptar las críticas de Putin, diciendo: «Putin no es fan mío».

Estados Unidos ha acusado al Kremlin de interferir en las elecciones de 2016, con unas acusaciones que ensombrecieron la presidencia de Donald Trump. Sin embargo, Putin siempre ha negado esas acusaciones y ha defendido a Trump.

En respuesta a las críticas occidentales a la entrevista con Tucker Carlson, Putin ha replicado que él nunca ha indicado durante la entrevista con la TV pública de Ruia que la campaña militar en Ucrania fuera una respuesta «a la amenaza de un ataque de la OTAN contra Rusia». «Lo único que podemos lamentar es que no hubiéramos empezado antes las acciones militares, al pensar que estábamos tratando con gente decente», ha indicado Putin, además de recordar que la responsabilidad recae en Kiev por incumplir los acuerdos de paz y por los ataques ininterrumpidos durante ocho años contra los territorios prorrusos, recalcó que Rusia no comenzó la guerra y sólo quiere ponerle fin.

Las declaraciones de Putin se han producido tras una semana de controversia internacional por los recientes comentarios de Trump sobre la OTAN y las crecientes tensiones entre demócratas y republicanos estadounidenses por un paquete de ayuda de 95.000 millones de dólares que incluye ayuda militar a Ucrania.

Además, el presidente Joe Biden cargó en una rueda de prensa contra los periodistas después del informe del abogado especial Robert Hur en el que se documenta que Biden se quedó con documentos clasificados relacionados con una llamada de diciembre de 2015 con el primer ministro de Ucrania después de advertir a su asistente que «[obtuviera] una copia de esta conversación». En el mismo texto, se explica que no hay pruebas para presentar cargos formales contra Biden, al que se le describe como un hombre anciano desmemoriado.

La llamada entre el entonces vicepresidente Biden y el entonces primer ministro ucraniano Arseniy Yatsenyuk tuvo lugar el 11 de diciembre de 2015, pocos días después de que Biden, que ahora tiene 81 años, regresara de un viaje a Kiev, durante el cual presionó a Yatsenyuk y al entonces presidente ucraniano Petro Poroshenko para que despidieran al entonces fiscal general Viktor Shokin que investigaba la empresa Burisma en la que su hijo tenía un asiento en el consejo de administración, Hunter Biden.