Internacional

Las protestas obligan al Gobierno libanés a aprobar un paquete de reformas económicas

El Gobierno libanés cede. Las huelgas generales y las fuertes protestas que se registran en los últimos cinco días en el país del cedro han forzado al Gobierno a aprobar este lunes un paquete de reformas económicas. El primer ministro, Saad Hariri, ha anunciado un recorte a la mitad de los sueldos de los altos cargos y la supresión del Ministerio de Información, según informa la cadena Al Jazeera. Además, todas las fuerzas políticas se han puesto de acuerdo en desbloquear los presupuestos de 2020, sin introducir nuevos impuestos.

Pese a que el detonante de las protestas fue el anuncio de un impuesto a los servicios de voz de WhatsApp, la corrupción y el estancamiento económico son los dos principales motivos del descontento de la población. Por ello, el Gobierno también ha planteado crear un comité anticorrupción antes de final de año, una ley para obligar a devolver los fondos públicos robados, reducir el déficit del sector público, combatir el contrabando, destinar más recursos para las familias pobres e incrementar los impuestos a los beneficios de los bancos.

A pesar del anuncio de las reformas, el Ejecutivo libanés no ha conseguido frenar las manifestaciones. “Nos quedaremos en las calles, no creemos lo que dice el presidente”, ha explicado la profesora Maya Mhana este lunes en Beirut a la agencia de noticias Associated Press. Los manifestantes siguen pidiendo que la dimisión del Gobierno, al que acusan de permitir la corrupción y que dejen el poder en manos de jueces hasta que se celebren las elecciones.

“Vuestro movimiento ha servido para que hayamos podido alcanzar un acuerdo (en el Gobierno)”, ha afirmado Hariri en un discurso dirigido a los libaneses citado por la BBC. El país del cedro se enfrenta a un panorama económico poco alentador: la libra libanesa ha caído un 10% respecto a la divisa estadounidense en los últimos dos decenios y el Banco Mundial prevé que la economía libanesa caerá un 0,2% del PIB este año.

Los manifestantes desconfían del sistema político establecido en el país hace tres décadas. El acuerdo que puso fin a los conflictos religiosos en el Líbano, que asigna los cargos de poder en función de la procedencia religiosa, ha provocado un clima de corrupción generalizada. Y la ineficiencia de las Administraciones públicas ha arruinado a una nación que fue considerada la “Suiza del Mediterráneo” antes de la Guerra Civil.

“Estamos dando pasos para combatir la corrupción y afrontar grandes proyectos”, aseveró Hariri en el mensaje que ha lanzado a los ciudadanos. El Gobierno ha anunciado que los bancos permanecerán cerrados durante la jornada de este martes hasta que no se estabilice la situación. Hasta 40 países de la UE anunciaron el año pasado que estaban dispuestos a donar un fondo de hasta 10.000 millones de euros para sacar al Líbano de la bancarrota, siempre y cuando Hariri acepte las reformas económicas y el control de gasto.