Internacional
Conflicto Oriente Próximo

Hungría anuncia que abandona el Tribunal Penal Internacional en la visita de Netanyahu

Netanayhu y Orbán tratarán el traslado de la Embajada de Hungría desde Tel Aviv a Jerusalén

Netanyahu se ve forzado a cambiar al embajador de Israel en España

El Gobierno de Hungría ha anunciado este jueves la futura salida del país del Tribunal Penal Internacional (TPI) de La Haya. Este es un movimiento que coincide con la visita oficial del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahyu, sobre quien pesa una orden de arresto en el marco de las investigaciones por la ofensiva militar sobre la Franja de Gaza.

Por su parte, el ministro de Defensa de Hungría, Kristóf Szalay-Bobrovniczky, ha confirmado la llegada de los Netanyahu a través de su perfil en la red social Facebook, donde ha compartido varias imágenes que muestran cómo han sido recibidos por la guardia de honor militar. «Damos la bienvenida al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, a Budapest», ha manifestado el titular de la cartera ministerial.

Viktor Orbán, que es uno de los más férreos aliados de Israel, rechazó el pasado mes de noviembre la orden del TPI, a pesar de que su país es un Estado que forma parte del Tratado de Roma, que sirve de cimiento legal a la corte, y terminó invitando al jefe del Ejecutivo israelí en visita oficial.

El mandatario húngaro describió en ese momento que «la orden de arresto es descarada, cínica y completamente inaceptable», y se comprometió a garantizar «la libertad y seguridad» de Netanyahu.

Durante la visita, Netanyahu y Orbán tratarán el posible traslado de la Embajada de Hungría desde Tel Aviv a Jerusalén, en lo que se trataría de una nueva ruptura del Gobierno húngaro con la doctrina de la Unión Europea (UE). Por su parte, Bruselas sigue la resolución 478 del Consejo de Seguridad de la ONU de 1980, que llama a todos los Estados miembros de la ONU a retirar de Jerusalén las embajadas y misiones diplomáticas en Israel.

Netanyahu vuelve a la guerra contra Hamás

Israel puso fin a la tregua con Hamás el pasado 18 de marzo con una oleada de bombardeos (cerca de 35) contra toda la Franja de Gaza. Este ataque llegó tras la acusación de Benjamin Netanyahu al grupo terrorista de «rechazar todas las ofertas» de los mediadores en el marco del acuerdo de alto el fuego. Según las autoridades gazatíes, 325 personas murieron en el bombardeo. El estado hebreo aseguró que consultó a Estados Unidos antes de ejecutar el bombardeo y la Casa Blanca confirmó que Donald Trump estaba al corriente.

A las víctimas mortales se le sumaron las personas que seguían «bajo los escombros», según el Ministerio de Sanidad gazatí, que llegó a alertar de que las reservas de sangre se habían «agotado», por lo que pidió a la población que donase «urgentemente».