¿Cómo se hace?
Insectos

Cómo usar el laurel para ahuyentar ciertos insectos

La mayoría de nosotros solemos tener algunas hojas de laurel en casa porque son un ingrediente indispensable en la gastronomía actual. Muchas de las recetas que hemos heredado de padres y abuelos lo llevan como un elemento decorativo pero que también aporta sabor. Dicho esto, es importante entender que tiene otros usos interesantes. Por ejemplo, ¿sabes cómo usar el laurel para ahuyentar ciertos insectos?

Sí, más allá de sus aportes culinarios el laurel es un aliado imprescindible en las casas si lo que pretendemos es deshacernos de insectos. Sus propiedades lo hacen ideal para eliminar las cucarachas de nuestro hogar, aunque casi todas las especies similares lo detestan. Significa esto que, tan pronto notes su presencia en tu vivienda, deberías prepararles una trampa usando las hojas de laurel.

Usar el laurel para ahuyentar ciertos insectos

Un repelente eficiente y 100% natural

Lo mejor del siguiente truco es que es completamente eficiente, por lo que percibirás poco a poco cómo las cucarachas dejan tus rincones. Pero no menos relevante es que se trata de un repelente natural, algo clave si tenemos niños o mascotas en casa que corren peligro cuando utilizamos repelentes químicos. El consumo de laurel -en pocas cantidades- no tiene ningún tipo de contraindicaciones.

Otra ventaja es que si acabas de descubrir que tienes insectos en casa y no puedes esperar a ir a la tienda, seguro dispones de laurel. Aprovechándolo de la forma que vamos a enseñarte a continuación, evitarás que estas plagas sigan proliferando en tus espacios.

Ingredientes para repelente de laurel

Todo lo que necesitas para producir tu repelente casero de laurel son unas hojas secas de este árbol originario de la región Mediterránea. Las hojas tienen que estar en buen estado, y no valen aquellas que se hayan echado a perder por alguna razón ya no harán efecto.

Repelente de laurel, paso a paso

Coge las hojas en cuestión y viértelas en un procesador de alimentos, triturándolas hasta obtener un polvo fino, en el que no se vean hojas. Retira el polvo del aparato y ponlo creando una especie de camino en las orillas del suelo o en puntos estratégicos donde habitan estos insectos; cucarachas o los que sean. Lo recomendable es abarcar todos los lugares en los que se encuentran, sin excepciones.

Para mejorar los resultados, te aconsejamos además limpiar esos sitios con un poco de vinagre blanco para que no queden rastros anteriores de los insectos que puedan motivarles a regresar independientemente de la intimidante presencia del laurel para ellos.

Por último, es mejor sustituir el polvo de laurel cada diez días aproximadamente para que las cucarachas no vuelvan.