‘Zapeando’: Valeria Ros confiesa que sufrió un aparatoso accidente de camino a un estreno

No es ningún secreto que, poco a poco y con el paso del tiempo, Valeria Ros se ha convertido en una de las colaboradoras estrella de Zapeando. ¡Un pilar fundamental! El pasado miércoles, la cómica quiso dar a conocer una nueva anécdota en el programa de LaSexta. Tal y como nos tiene acostumbrados, ha conseguido dejar a sus compañeros y a la audiencia sin palabras.

«A ver, tengo el coche destrozado porque…», comenzó diciendo Valeria Ros en Zapeando. Isabel Forner quiso incitar a su compañera para que contase la historia con todo lujo de detalles: «Cuéntalo, que no te de vergüenza». La cómica no tardó en responder: «Me da mucha vergüenza. ¡Cómo no me va a dar si estaba parada!».

Acto seguido, empezó a contar lo que había sucedido: «El caso es que salía de Globomedia super emocionada porque iba a la premiere de la película de Mario Casas y no veía». Acto seguido, fue más allá: «Estaba tan nerviosa y hacía tanto calor que me subí al coche y ya sabéis que no hay casi espacio con el muro para salir, es súper difícil aparcar ahí».

El percance de Valeria Ros con su coche en el aparcamiento del trabajo por culpa del freno de mano https://t.co/bjmbNFe2D3

— Zapeando (@zapeandola6) September 13, 2023

«Entonces yo de repente me subí, muy nerviosa, hacía mucho calor, iba monísima vestida (…) Como tengo un híbrido el freno de mano no es con palanca, es un dedito», continuó explicando. A continuación, añadió: «Fui a coger una cosa y dije ‘pongo el freno de mano’. Y entonces vi que el coche iba solo y miré para atrás y en vez de darle al freno le di al acelerador. Y entonces me choqué».

Tras explicar el golpe que tuvo, Valeria Ros reconoció que la cosa fue más allá de los daños que sufrió el coche: «Me vino el señor de mantenimiento para decirme que tenemos que hacer un parte». Dani Mateo no tardó en pronunciarse: «Lo que no sabes es que la productora va a aprovechar ese golpe para colar todos los manchones, los rotos, el aire acondicionado que no va… Les has venido bien». Afortunadamente, ¡todo quedó en una curiosa anécdota!