La única petición de Daniel Sancho a su madre, Silvia Bronchalo, tras su visita

Daniel Sancho se encuentra en una prisión de Tailandia, concretamente en la de Koh Samui, tras haber confesado que no solamente asesinó a Edwin Arrieta sino que le descuartizó. Una situación verdaderamente trágica y terrible por la que podría llegar a ser condenado a pena de muerte.

Este viernes, Silvia Bronchalo ha hecho una segunda visita a su hijo, Daniel Sancho, en prisión. Tras estar varios minutos con el joven, ella se ha mostrado mucho más tranquila. Con sus inseparables gafas de sol, Bronchalo ha atendido a los medios de comunicación que allí se encontraban, para agradecerles el respeto que han tenido con ella desde su llegada a Tailandia.

Entre otras cuestiones, la madre de Daniel Sancho ha dado a conocer cómo se encuentra el detenido, pero también en qué punto se encuentra ella. “Está mejor, está tranquilo y lo están tratando muy bien. Estamos esperando que todo se resuelva con tranquilidad”, reconoció Silvia Bronchalo a los medios de comunicación.

El segundo encuentro entre Daniel Sancho y Silvia Bronchalo en prisión: «Ha reconocido los hechos, no ha llorado y le ha pedido que sea fuerte» #PdV18A https://t.co/xAM9Z1CgnW

— El programa de Ana Rosa (@elprogramadear) August 18, 2023

Por si fuera poco, reconoció que en ese primer cara a cara, los dos terminaron emocionándose muchísimo. Al fin y al cabo, madre e hijo son conscientes de que la situación es realmente crítica. No solamente por los hechos que se le acusan, sino porque el propio chef ha reconocido haber cometido el asesinato y posterior descuartizamiento de Edwin Arrieta.

Dadas las circunstancias, Daniel Sancho ha aprovechado la visita de su madre para hacerle una petición muy concreta. El propio Jorge Luque, reportero de El programa de verano, lo confesó en directo: “Le ha pedido que sea fuerte”. El hijo de Rodolfo Sancho es consciente de su complicada situación y de que se vienen meses muy duros para la familia. Por lo tanto, su único objetivo es tratar de protegerles en la medida de lo posible.