Las víctimas estallan ante el homenaje a un etarra con 3.860 años de condena acercado por Sánchez

El etarra Daniel Pastor será homenajeado este viernes, 29 de julio, durante las fiestas del barrio bilbaíno de Recalde. Al igual que ocurrió el año pasado, el programa oficial de festejos no recogía esta actividad, pero el entorno de ETA en este distrito de Bilbao ya ha comenzado a movilizarse. Aunque Daniel Pastor ha sido uno de los presos beneficiados de la política de acercamiento de presos a cárceles vascas del Gobierno de Pedro Sánchez, sus familiares y amigos volverán a pedir la amnistía total del terrorista. Algo que dejaría sin efecto la condena de 3.860 años que, actualmente, recae sobre Pastor por asesinar al militar Luis Conde de la Cruz, al policía nacional Eduardo Antonio Puelles y por estallar la furgoneta bomba que dejó 160 heridos -41 de ellos fueron niños- en el cuartel de la Guardia Civil de Burgos.

El pasado mes de diciembre, Daniel Pastor fue trasladado hasta el País Vasco dentro de la estrategia de acercamientos de ETA que ha mantenido durante la legislatura el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Pastor fue devuelto a País Vasco junto a los asesinos del político socialista Ernest Lluch; del concejal del PP Alberto Jiménez Becerril y su mujer Ascensión García y del político navarro Tomás Caballero. Una de las remesas con más asesinatos a sus espaldas. Algo que no evitó, a pesar de la denuncia de las víctimas, que los etarras fueran enviados a prisiones vascas.

Daniel Pastor es considerado uno de los etarras más sanguinarios. El 22 de septiembre, el brigada Luis Conde fue asesinado en Santoña, donde disfrutaba junto a su mujer de unos días de vacaciones. Daniel Pastor fue el jefe del comando que perpetró este asesinato. El 19 de junio de 2009, Pastor asesina al inspector de policía Eduardo Puelles tras colocar una bomba en el coche personal del agente. El 27 de julio de ese mismo año, Pastor detona una furgoneta bomba frente a la casa cuartel de Burgos, donde deja 160 heridos, de los cuáles, 41 eran niños. Por ello, Daniel Pastor fue condenado a 3.860 años de cárcel.

El Partido Popular del País Vasco ya se ha puesto en marcha para tratar de frenar el acto. «Instamos a quienes ostentan responsabilidades públicas a que, con la ley en la mano, impidan una nueva agresión a las víctimas del terrorismo», solicitan los populares.

«Más castigo»

Daniel Pastor, lejos de arrepentirse, se ha mostrado en varias ocasiones especialmente contrario al perdón, ha asegurado en varias ocasiones que sólo desea «castigar a los que les castigan». Pastor siempre se ha mostrado en desacuerdo con el sentir del colectivo de presos terroristas. No contempla el perdón, como sí lo han hecho algunos «conversos sumisos a la opresión», sino que pretende llevar a cabo la venganza. «Deseamos esforzarnos junto a la clase trabajadora en la creación de un frente unitario que nos permita avanzar y dotarnos de los instrumentos necesarios para poder castigar vuestro castigo».

«Anhelamos disponer de los medios con los que cuenta el Estado, en forma de república popular, para proteger las conquistas democráticas que poco a poco iremos arrebatando, no sin resistencia, a la oligarquía; a la corrupción y saqueo de los trabajadores; a la represión; a la intervención y dominación imperialista; a la negación de la autodeterminación para las naciones oprimidas», asegura el terrorista.

Daniel Pastor tampoco ha escatimado los ‘elogios’ para el Gobierno de Pedro Sánchez, quien ha llevado a cabo su acercamiento al País Vasco. A pesar de este gesto, el etarra asegura que el Ejecutivo es una representación del «social-fascismo», por lo que cuestiona los valores democráticos del ministro Marlaska.