España

TV3 pone una foto de Hitler para hablar de los constitucionalistas que quitan lazos amarillos

El director de la oficina de Derechos Civiles de la Generalitat, Adam Majó Garriga, compareció el viernes en el programa Tot es mou de TV3 para explicar que en los dos últimos años se han producido «328 agresiones de extrema derecha» en Cataluña.

Tras exponer un dato tan alarmante, Majó aclaró que la mayoría de estas «agresiones» corresponden a grupos «muy minoritarios, pero muy activos y peligrosos» que se dedican a quitar lazos amarillos y banderas esteladas en las calles. «Constituyen una amenaza para el ejercicio de los derechos fundamentales», advirtió.

Mientras Adam Majó realizaba estas declaraciones, los realizadores del programa de TV3 ponían en la pantalla la imagen de un busto de Hitler. Una técnica propia de su ministro de propaganda, Joseph Goebbels, utilizada por la televisión pública para criminalizar y presentar como peligrosos delincuentes a los constitucionalistas que quitan lazos amarillos de los espacios públicos.

En la estadística presentada por Adam Majó en TV3 no se incluyen, por supuesto, la brutal agresión a una mujer que quitaba lazos amarillos, a la que le rompieron la nariz, ni los ataques violentos organizados por la CUP y los CDR contra cada acto públicos que Vox y Ciudadanos celebran en Cataluña.

El propio director de la Oficina de Derechos Civiles de Torra, Adam Majó, aclara el motivo: en su perfil de Twitter deja claro que tanto el PP de Pablo Casado, como Vox, como Sociedad Civil Catalana (SCC) y cualquier otra organización constitucionalista son grupos de «extrema derecha». Por tanto, son violentos agresores y no pueden aparecer como víctimas de una agresión.

En su blog publicado en el diario independentista Vilaweb ha escrito los siguientes elogios a los atentados cometidos en democracia por el grupo terrorista Terra Lliure: «Terra Lliure entendió que su papel no era estrictamente militar sino simbólico, de propaganda (armada). Con la monarquía constitucional mucho más consolidada, el papel de una organización clandestina debía ser representar la alternativa, la oposición al modelo impuesto, y eso, simbolizar la residencia, el enfrentamiento y la posibilidad de otro proyecto de la nación catalana, Terra Lliure lo consiguió extraordinariamente bien pese a los escasos medios de los que disponía».

Ahora, este personaje de la CUP que se dedica a elogiar los atentados terroristas de Terra Lliure es, por decisión del presidente Quim Torra, el encargado de alertar en TV3 de que los constitucionalistas que quitan lazos amarillos son grupos de «extrema derecha, muy minoritarios pero muy activos y peligrosos».