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La titánica misión del Ejército español: sin coches para adentrarse en Kabul al rescate de afganos

Las fuerzas especiales del Ejército español, los conocidos como ‘boinas verdes’ del Mando de Operaciones Especiales (MOE), ya están en Kabul. Han sido enviados para ejecutar misiones tipo NEO (evacuaciones de no combatientes) pero, por el momento, tienen prácticamente imposible operar: carecen de vehículos y no pueden adentrarse en la ciudad, tomada por los talibanes, para rescatar a aquellos afganos que colaboraron con España. Así es la titánica misión que tienen por delante.

La situación en Kabul es cada vez más compleja. Cada hora que pasa, reconocen fuentes militares consultadas por OKDIARIO, se hace más difícil poner a salvo a los cientos de trabajadores afganos y sus familias que prestaron servicio a la misión española durante las dos últimas décadas. De los que faltan por evacuar, un buen número de ellos ya ha conseguido llegar a Kabul, pero les separa del aeropuerto el telón de patrullas talibán que han desplegado los fundamentalistas alrededor de las instalaciones. A día de hoy, explican, es imposible atravesar por tierra esa franja y adentrarse en la ciudad.

El principal problema que se han encontrado los militares españoles de la Unidad de Operaciones Especiales (UOE) desplegada en Kabul es la ausencia de transportes. No hay vehículos que ofrezcan las suficientes garantías de seguridad para que un convoy pueda adentrarse dentro de la ciudad en busca de cooperantes y traductores afganos. De momento, su misión se limita a salidas a pie a las inmediaciones del aeropuerto para localizar a quienes hayan conseguido acercarse al aeródromo.

Según fuentes militares, el Ejército está estudiando la posibilidad de enviar próximamente medios técnicos de refuerzo, posiblemente vehículos ligeros, para realizar algún tipo de misión de rescate en pleno Kabul. Pero de momento no hay ningún tipo de confirmación oficial.

Un ‘ejército’ talibán enfrente

De hecho, explican las fuentes consultadas, a día de hoy ni siquiera Estados Unidos es capaz de realizar este tipo de incursiones terrestres al interior de la ciudad. Sus fuerzas especiales, presentes en el aeropuerto de Kabul desde el inicio de la crisis, no tienen autorización para entrar en la ciudad a bordo de los escasos vehículos blindados que tienen a su disposición. Se encuentran a la espera de autorización, que creen que llegará a la par que los refuerzos anunciados por el Gobierno estadounidense.

La situación en Kabul, relatan fuentes militares españoles, es surrealista. En el interior, las tropas de la OTAN se afanan por rescatar a civiles y evacuarlos sin prácticamente medios técnicos ni vehículos para realizar incursiones. Mientras, fuera del aeropuerto, las fuerzas de los talibanes hacen ostentación de todo el material y los blindados que han incautado al Ejército afgano.

Una unidad paracaidista británica en uno de los todoterrenos ‘incautados’.

«En esas condiciones, de momento no se puede organizar ningún tipo de misión fuera del aeropuerto. No hay seguridad suficiente y ningún mando va a asumir los riesgos», explican fuentes militares.

Otra de las alternativas por la que han optado algunos países es el despliegue de medios aéreos en el aeropuerto de Kabul. Alemania, por ejemplo, ha enviado helicópteros ligeros H145M para que sus fuerzas especiales puedan realizar evacuaciones aéreas. Estados Unidos también dispone en estos momentos de algunas aeronaves operativas, que ya han realizado rescates a ciudadanos estadounidenses que seguían atrapados en puntos dispersos de Kabul.