España
CRISIS DEL CORONAVIRUS

Sanidad rompe su pacto con Madrid: sólo hace test en Barajas a los viajeros de China con fiebre

El Gobierno de Pedro Sánchez incumple el protocolo que pactó con la Comunidad de Madrid para la realización de controles de detección del Covid en vuelos procedentes de China. Además de que los controles no son obligatorios, a diferencia de lo que solicitaba Madrid, tan sólo se están realizando test de antígenos a los pasajeros que tengan de 37,5 grados de temperatura corporal en adelante. El resto «pueden» ser sometidos a tan sólo un control visual y documental. Mientras, Italia obliga a todos los pasajeros a someterse al test sin excepción, como reclamaba la el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

El pasado viernes, el Ministerio de Sanidad de Carolina Darias, la Comunidad de Madrid y la Generalitat de Cataluña negociaron durante horas los detalles del protocolo a implantar en los controles fronterizos de los aeropuertos internacionales de Barajas y El Prat. Dos de las puertas de entrada del coronavirus en la pandemia de 2020 y que ahora fijan las miradas por la crisis sanitaria en China, que ya deja más de 250 millones de contagios en tan sólo un mes. Justo cuando se han reabierto las fronteras del país tras 3 años de restricciones para volar.

Sin embargo, de lo pactado en esa reunión a la realidad de los controles que ya se han realizado hay un trecho. El pasado sábado llegó a Madrid el primero de los vuelos directos a los que afectan los nuevos controles. Un Airbus A-350 de Air China, procedente de Pekín, con 80 pasajeros a bordo.

Lo que Sanidad realizó ante ese primer vuelo procedente de China dista mucho de ese protocolo pactado. Los viajeros de la única ruta directa fueron sometidos a un «control visual» y de temperatura, con un termómetro de pistola, para detectar a aquellos que tuviesen fiebre. Sólo los que mostraron un calor corporal superior a los 37,5 grados fueron sometidos a un test de antígenos. El resultado, según ha confirmado Sanidad, es que no se hallaron infecciones. La pasada semana, Italia detectó que en sólo dos vuelos procedentes de China había un 50% de contagios entre el pasaje.

Sin control

Según lo pactado entre el Gobierno y Madrid, el proceso a seguir incluía la presentación de la pauta vacunal completa o de un test negativo realizado entre 24 y 72 horas de antelación. La pauta completa sólo  se podía acreditar mediante el Certificado Digital de la UE, el llamado Pasaporte Covid. En caso de no disponer de ello, aun estando vacunado, se exigía una prueba PCR o de antígenos. Hasta ahí los requisitos documentales.

Pero el protocolo también incluía pruebas a los viajeros en destino: a la llegada de cualquier viajero procedente -directo o con escalas- de China se le sometería a un test de antígenos. Y Madrid insistió mucho en este punto: si ese test da positivo, el pasajero deberá someterse a una PCR y la muestra será enviada a un laboratorio de la comunidad para su secuenciación.

El objetivo de esta última prueba es rastrear a los contagiados de China en busca de una posible variación genética del coronavirus, una nueva cepa no controlada que pueda estar detrás de esa inexplicable explosión de casos de la que el país asiático apenas ha dado detalles a la comunidad internacional. Sobre todo, para determinar si puede producirse un escape vacunal ante esa nueva configuración del patógeno que pueda poner potencialmente en peligro a la población española, con un 93% de la población inoculada. Estas pruebas PCR, supuestamente, comienzan a hacerse en los vuelos que lleguen a partir de este lunes.

En la Comunidad de Madrid, tras conocer los detalles de estos primeros controles, no salen de su asombro por la diferencia entre lo pactado y lo que se está realizando finalmente en Barajas. Recuerdan, además, que entre las lecciones aprendidas a fuego durante tres años de pandemia se encuentra la certeza de que puede haber contagiados asintomáticos, capaces de portar y extender el patógeno sin mostrar signos físicos evidentes de su infección. Signos como la fiebre.

Italia

En Madrid ha sorprendido también la redacción de la disposición publicada en el BOE por Sanidad este sábado, que incluía el protocolo a realizar en frontera para la detección de casos en vuelos procedentes de China. En todo momento, el protocolo utiliza el condicional «podrán» para referirse a los controles a los que se pueden someter los viajeros. Tanto Madrid como Cataluña solicitaron un cribado universal a todo el pasaje, y no test aleatorios.

De hecho, lo que Madrid solicitaba era un protocolo muy similar al que Italia aplica de urgencia desde el pasado martes 27 de diciembre. La orden del Ministerio della Salute italiano habla en todo momento de «obligación de someterse a prueba de antígeno», «obligación de someterse a una prueba molecular -PCR- para su secuenciación, «obligación de aislamiento» en caso de contagio y «obligación de realizar una prueba de antígeno con resultado negativo para terminar el periodo de aislamiento».