Sanidad desconoce los casos bajo sospecha de la supercontagiosa cepa británica

El Ministerio de Sanidad contabiliza medio millar de casos de la cepa británica del coronavirus. Se trata de los casos confirmados. Sin embargo, existen multitud bajo sospecha. De hecho, la propia ministra, Carolina Darias, admitió hace unos días que los casos sospechosos podrían llegar hasta un 10% «del total de confirmados». Sin embargo, pese al evidente impacto de la mutación -hasta un 70% más contagiosa y, según las evidencias, también más letal- el departamento desconoce con precisión cuántos casos se investigan en la actualidad.

El impacto de esta cepa, que Sanidad despreció calificándolo de «marginal», es indudable. En Galicia, por ejemplo, los casos identificados se han triplicado en sólo una semana. En la Comunidad de Madrid, la variante ya representa, en algunas zonas y municipios, más de la mitad del total de positivos. La Junta de Andalucía alertó este mismo miércoles de que la incidencia de la cepa llega a un 20% en la comunidad autónoma, pero alcanza el 40% en las provincias de Cádiz y Granada. Las autoridades andaluzas han advertido de un «repunte explosivo de casos» en las próximas semanas ya que, como apuntan las previsiones, la cepa británica está aún lejos de su potencial máximo de contagio.

El pasado viernes, el Ministerio de Sanidad rectificó de nuevo su informe sobre las nuevas cepas para admitir una «posibilidad real» de que la variante británica, ya presente en 14 comunidades, sea más grave y letal.

«Existe una posibilidad real de que pueda estar relacionada con mayor gravedad y mayor letalidad. El riesgo de que se produzca un aumento progresivo en las hospitalizaciones asociado a la circulación cada vez mayor de la variante es por tanto elevado, tanto por el aumento de la incidencia como por el aumento de la gravedad», abunda el informe de Sanidad. Con anterioridad, el Ministerio había afirmado que la cepa no era más grave. 

En la última actualización del documento ‘Circulación de VOC 202012/01 (B.1.1.7) y otras variantes de SARS-CoV-2 de interés para la salud pública en España’ se destaca que la cepa británica está asociada a una mayor capacidad del virus para transmitirse «lo que puede asociarse a mayor incidencia de la enfermedad en los lugares donde circule ampliamente y no se apliquen estrictamente las medidas de prevención».

Según el informe, la distribución de esta variante «es muy variable», de forma que la prevalencia estimada en la semana 4 de 2021 se sitúa en un 20.3 % en Baleares, un 0.4 % en Castilla-La Mancha, un 53,3 % en Galicia o un 4 % en País Vasco.

No obstante, concluye que su presencia «está aumentando rápidamente», lo cual «puede condicionar un aumento de la incidencia y posiblemente la tasa de hospitalización y la letalidad en nuestro país en las próximas semanas».

Sanidad, en ese informe, confirma además la existencia de dos casos de la sudafricana y ninguno de la brasileña. No obstante, la Comunidad de Madrid ya ha confirmado un caso de ésta última.

Sobre la primera, explica que «no hay evidencias de mayor virulencia», aunque algunos estudios muestran una disminución de la capacidad de neutralización de sueros de pacientes convalecientes, «por lo que preocupa que pueda producir un mayor número de reinfecciones o reducir parcialmente la eficacia de las vacunas».

Reino Unido avisó ya el pasado 14 de diciembre a la Organización Mundial de la Salud (OMS) de la detección de la nueva cepa. Sin embargo, el Gobierno se resistió en un principio a tomar medidas, como la suspensión de vuelos con el país, que en la actualidad se limitan a nacionales o residentes en España y Andorra.

De «marginal» a «dominante»

Pese a la preocupación por su mayor poder de contagio, Fernando Simón aún sostenía el 11 de enero que el impacto de la cepa sería «marginal». Apenas diez días después, el epidemiólogo afirmaba lo opuesto: que podría llegar a ser «una cepa dominante a mediados de marzo». «Esperamos que sea una cepa dominante que puede llegar al 40-50% de ocupación de espacio aproximadamente a mediados del mes de marzo», destacó Simón.

Durante semanas, Sánchez se resistió a tomar medidas contra las nuevas variantes. Ello, pese a que, como reveló OKDIARIO, un informe de Sanidad advertía de su «impacto potencial para la salud pública», como, en el caso de la cepa originaria de la Amazonia brasileña, su posible «escape a la respuesta inmune».

Otro informe, firmado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CSIC) y el Instituto de Biomedicina de Valencia -‘Una perspectiva genómica de la pandemia: lecciones en salud pública’-, concluía ya en octubre que «el cierre de fronteras a países con alta incidencia es relevante para evitar la importación simultánea y múltiple del virus».