Sánchez gastará 11 millones en remodelar el centro de ilegales de Melilla con «alojamientos sostenibles»
El Gobierno asegura un "elevado nivel de eficiencia energética y la aplicación de criterios de sostenibilidad"
Las obras, financiadas con fondos UE, se han tramitado por la vía urgente debido a la presión migratoria
El Gobierno de Pedro Sánchez acaba de licitar el contrato para la remodelación del centro de acogida de inmigrantes irregulares de Melilla por un importe de 11 millones de euros. Un procedimiento tramitado por la vía de urgencia y sostenido con fondos europeos del Plan de Recuperación que prevé las obras necesarias para habilitar «alojamientos sostenibles», entre otras actuaciones, como cubrir una pista polideportiva.
Así consta en los pliegos -consultados por OKDIARIO- de esta licitación realizada por la Secretaría de Estado de Migraciones. En la memoria justificativa de este contrato, el Gobierno alude directamente a la crisis migratoria sin precedente que afecta a la ciudad autónoma y que el Ejecutivo central es incapaz de frenar.
En concreto, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones señala que «la urgencia se justifica en la necesidad de contar con las obras especificadas para responder a la situación de fuerte presión migratoria y poder cumplir con las obligaciones actuales del Estado en materia de inmigración, apreciando que la tramitación ordinaria del procedimiento impediría al contrato alcanzar su finalidad, por lo que es preciso acelerar la tramitación del presente expediente de contratación».
Asimismo, el Gobierno añade que «concurren dos circunstancias que exigen que su tramitación se lleve a cabo a través de un procedimiento de urgencia, tanto la actual situación del sistema de acogida que se encuentra muy tensionado, como la necesidad de ajustarse a los plazos de cumplimiento de objetivos e hitos establecidos en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, tanto en su planificación como en su ejecución».
El importe de licitación asciende a 11.107.746,35 euros, impuestos incluidos (10.097.951,23 euros, sin IVA), y el plazo de ejecución alcanza los 12 meses. Las empresas candidatas tienen hasta el próximo 17 de febrero para postularse.
Las obra a ejecutar sobre el edificio CETI de Melilla ubicado en la Carretera de Farhana se resumen en las siguientes actuaciones: tratamientos y redes de agua; ampliación de enfermería; renovación de cocina; red eléctrica; remodelación de alojamientos; urbanización y mejora de la instalación contra incendios; nuevos alojamientos; nuevo edificio deportivo; cubierta pista deportiva; instalación fotovoltaica; mejoras de eficiencia energética y mejoras de accesibilidad, precisan los pliegos.
El Gobierno advierte que valorará «medidas concretas destinadas a mejorar la sostenibilidad de los materiales utilizados en la obra, otorgando prioridad a aquellos que sean renovables, reciclados o que tengan un bajo impacto ambiental durante su proceso de fabricación».
La memoria del proyecto indica que teniendo en cuenta las 684 plazas oficiales del CETI y ante la próxima realización de las obras, la «ocupación máxima simultánea no superaría las 492 personas, quedando zonas disponibles de dormitorios y servicios anexos, sin ocupación, destinadas a las 192 personas restantes».
Paneles fotovoltaicos
Sobre el nuevo módulo de alojamientos, el Gobierno indica que consistirá en «la colocación en serie de las habitaciones, generando una figura geométrica que se adapta al espacio creando dos espacios que dan acceso a dichas habitaciones». Aquí se ha proyectado «un importante sistema de captación solar para conversión en energía eléctrica mediante paneles fotovoltaicos, tanto para consumo propio como para vertido del exceso a la red», señala el Ejecutivo en esa concepción de «alojamientos sostenibles» financiados con fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Por ello, el Gobierno subraya que en esta obra «se asegurará un elevado nivel de eficiencia energética y la aplicación de criterios de sostenibilidad».
El CETI (Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes) de Melilla es un establecimiento de la Administración Pública (adscrito al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, a través de la Dirección General de Protección Internacional y Atención Humanitaria) concebido desde su creación como dispositivo de permanencia provisional de extranjeros en tanto se realizan los trámites de identificación y chequeo médico previos a cualquier decisión de cara a su derivación al recurso más adecuado. Este centro inició su funcionamiento en 1999.
Entretanto, el presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP), reclamó este martes el despliegue de Frontex (la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costa) en la frontera de la ciudad autónoma, Ceuta y Canarias para ayudar a resolver la crisis migratoria, buscando así una mayor implicación de la UE. Para Imbroda, si Frontex no se ha movilizado aquí, es porque «no se ha demandado lo suficiente» por parte del Gobierno de Sánchez, remarcó en un desayuno informativo organizado en Madrid por Nueva Economía Fórum.
«Estamos a expensas de los vaivenes de Sánchez en las relaciones con Marruecos», criticó Imbroda, calificando de «humillación» para la ciudad autónoma la reapertura a modo de «ensayo» -según le trasladó el Gobierno central- de la aduana comercial con Marruecos.