España
Represión en Cuba

Sánchez es incapaz de llamar «dictadura» a Cuba pero se permite exigirle a Biden que levante el embargo

Pedro Sánchez sigue en la línea ‘blanda’ y complaciente con la dictadura castrista que adoptó desde que el pueblo cubano dijo «basta». El presidente del Gobierno no define abiertamente a Cuba como una dictadura y no se moja sobre las nuevas sanciones que EEUU ha impuesto a la isla. Es más, critica el embargo estadounidense y lanza un dardo a Joe Biden asegurando que la situación se debe resolver «sin injerencias de nadie».

Precisamente Sánchez se encuentra en EEUU en el marco de su gira americana para captar inversiones para España, un fracaso ya que ni Biden ni ninguna otra autoridad importante del país le ha recibido, y desde allí ha criticado la postura estadounidense respecto a Cuba defendiendo que la caída del turismo en el país caribeño por el Covid ha sido si cabe más «terrible» debido al embargo.

El presidente español no quiere posicionarse en contra la represión en Cuba y adopta un papel de mero espectador y pide que se comporten igual en EEUU. En una entrevista en la CNN en español ha defendido la necesidad de que Cuba emprenda «sin injerencias de nadie» reformas y transformaciones para «poder disfrutar de derechos y libertades».

Además, no ha querido pronunciarse sobre las nuevas sanciones que EEUU ha impuesto a autoridades cubanas por la «represión» de las protestas que comenzaron en la isla el 11 de julio. Sánchez ha mostrado su «respeto absoluto» a estas sanciones asegurando que se trata de una «cuestión interna de la política estadounidense».

Ha sido entonces cuando ha asegurado que la posición de España y de la Unión Europea es «bien conocida» y, según el presidente, pasa por pedir a Cuba reformas para avanzar en «derechos y libertades» pero «sin injerencias». Unas injerencias que precisamente el pueblo cubano pide para poder acabar con la dictadura castrista.

En una conversación informal con periodistas este miércoles en Nueva York, Sánchez recordó que esa posición pasa también por rechazar el embargo estadounidense sobre la isla.

Pide solidaridad con Cuba

Desde suelo estadounidense y con la negativa de Biden a reunirse con él, Pedro Sánchez ha arremetido sin pudor contra la postura de EEUU respecto a Cuba. Dice que la «terrible» situación del sector turístico en la isla se ha visto empeorada por el embargo, un ataque directo a la política estadounidense respecto a la dictadura.

El presidente español ha señalado que las protestas que se están produciendo hay que analizarlas desde un enfoque «global» y ser «conscientes de que el coronavirus «está dando muy duro» en Cuba y que, por ello, «necesitan la solidaridad de la Comunidad Internacional», por ejemplo, en forma de vacunas.

«Esto tiene una translación en un sector fundamental, aun más como consecuencia del embargo, que es el sector turístico, que en Cuba sufre consecuencias terribles», ha apostillado, criticando el embargo.

Además, ha recalcado que él mismo ha pedido a Cuba que emprenda reformas y transformaciones, si bien dejando claro que estas deben llevarse a cabo «sin injerencias de nadie», para que los cubanos puedan «ellos solos» encontrar «su camino para poder disfrutar derechos y libertades» que en España se disfrutan ya «desde hace ya muchos años».

«Son muchos aspectos detrás de las movilizaciones. La Comunidad Internacional debemos hacer ejercicio de solidaridad con el pueblo cubano, donando dosis de vacunas y ayudando a proteger a la sociedad en cuba», ha apostillado.