España
Independentismo en Cataluña

Torra consiente que el vandalismo amarillo llegue a monumentos que son Patrimonio de la Humanidad

La muralla de Tarragona y la ciudad íbera de Tivisa, atacadas por los radicales

El alcalde de Tivisa anima a los CDR a poner los lazos en su pueblo

La «policía política» en que Quim Torra ha convertido a los Mossos d’Esquadra se dedica a perseguir la retirada de propaganda golpista en Cataluña mientras permite que los mismos lazos amarillos ensucien incluso monumentos protegidos como Patrimonio de la Humanidad. Está ocurriendo en capitales como Tarragona, donde su muralla romana (siglo II antes de Cristo) luce decenas de nudos de plástico, o en localidades de esta misma provincia como Tivisa, en la que los separatistas han hecho pintadas en el emblemático Castellet de Banyoles (siglo III a.C.), considerada una de las joyas de la arqueología ibérica en España.

Éste es el aspecto que luce la milenaria muralla construida por los romanos en la antigua Tarraco. Un enclave declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO que recibe centenares de miles de visitas cada año. Algo que no parece le importe a su alcalde, Josep Félix Ballesteros (PSC), quien ya advirtió el pasado mayo que no quitaría los lazos golpistas de las calles de su municipio.

Otro de los lugares donde los Mossos y la administración local hacen gala de la doble moral del separatismo es en Tivisa, una localidad de la comarca de Tierras del Ebro. Allí se ubica la ciudad íbera del Castellet de Banyoles, uno de los mayores tesoros de la arquelogía prerromana en nuestro país.

Erigido entre los siglos IV y III antes de Cristo, este asentamiento ibérico descubierto en 1912 ha sido objeto de pintadas en sus ánforas, muros y paneles informativos. Los vándalos ni siquiera han respetado este valioso yacimiento con tal de llenarlo de su propaganda política.

Los mossos sí actúan si los quitan

En paralelo, los mossos identificaban el pasado viernes a 14 personas por arrancar lazos de las calles de tres pueblos de la comarca tarraconense: Mora la Nueva, Tivisa y Vandellòs. Sin embargo, no han llevado a cabo ninguna actuación tras estos actos de vandalismo. Ni la policía catalana ni las autoridades locales o autonómicas demuestran el mismo celo por lo que, en este caso, no consideran constituya la  «alteración del orden público» que sí atribuyen a la retirada de lazos y que pretenden multar con hasta 30.000 euros.

El alcalde de Tivisa, Jordi Jardí (Junts pel Sí) luciendo el lazo golpista.

Para más inri, el alcalde de Tivisa defiende la presencia de propaganda golpista en edificios públicos del municipio. «No han tocado el lazo amarillo que se enciende cada noche en el Ayuntamiento, y no lo pensamos retirar», ha afirmado esta semana Jordi Jardí tras la actuación policial contra los constitucionalistas. El regidor, de Junts pel Sí, iba más allá y animado a los CDR a recolocarlos:»Ellos llenaron las plazas de nuestro pueblo, son libres de reponerlos «, asegura ya que es partidario de «respetar» estos símbolos.

Por cierto, que ante la indignación ha comenzado a provocar la vandálica acción entre sus vecinos  («Basta, parad ya, por favor» o un irónico «¡Qué bonita nos está quedando Cataluña!» puede leerse en Twitter ), los CDR han comenzado a difundir mensajes en las redes sociales negando la autoría de las pintadas en la ciudad ibérica de Tivisa. «Queremos denunciar y condenar el ataque al mobiliario urbano. No hemos sido nosotros», han dicho.  Algo que no ha convencido a esos mismos habitantes de Tivisa:»Conspiraciones no, por favor», señalan.