El PP exige a la Junta una explicación sobre el escándalo del vídeo insultante de su alto cargo

«No es la primera vez ni será la última, me temo». Alicia Martínez, vicesecretaria de Política Institucional y Sectorial del Partido Popular en Sevilla, anuncia que el Grupo Popular en el Parlamento andaluz va a presentar una solicitud de información al Gobierno regional «para saber qué ha pasado con el escándalo de María Eugenia Sánchez, si es cierto que después de publicar ese vídeo fue ascendida a la Delegación provincial y por qué se le ha movido de un sitio al otro».

María Eugenia Sánchez era directora del colegio público Paulo Orosio en el año 2014, cuando grabó un vídeo en el que insultaba al PP y llamaba «maricones» a los homosexuales. Ese vídeo fue enviado a los docentes de su centro, e incluía unas frases en las que les indicaba a quién debían voar y a quién no en las inminentes elecciones al Parlamento Europeo.

«Ese vídeo es insultante», sostiene la dirigente popular, «y es lamentable que tengamos que hablar de estas cosas en lugar de hablar del os logros que haya conseguido ese centro» en la formación de sus alumnos. Para Martínez, «un centro público es un lugar donde aprender, es decir, donde no se puede adoctrinar y es grave que desde los puestos de dirección se trate de aleccionar a profesores y alumnos sobre ideas políticas».

La vicesecretaria del PP en Sevilla denuncia, asimismo, el «oscurantismo» dela Junta en sus procederes y decisiones. «Ellos presumen de portal de transparencia, pero a veces es imposible conocer qué puestos hay en la Administración y quién los ocupa», denuncia. Y por eso, los populares quieren confirmar el dato denunciado por este periódico de que María Eugenia Sánchez es actualmente la responsable de Educación Especial y Compensatoria en la delegación sevillana de la Consejería de Educación.

«Porque no sería el primer escándalo de esa delegación», recuerda Martínez. «Ya este verano descubrimos que tres de sus altos cargos lo eran sin reunir los requisitos, y habían sido nombrados a dedo creando los puestos ‘ad hoc’ para ellos». Se refiere la dirigente del PP a Carmen Liébana, quien era jefa de Planificación; a Luis Sanchís, que ocupaba el cargo de jefe de Recursos Humanos; y, sobre todo, a Alberto Moreno, que tuvo que dimitir como jefe de la Inspección de Sevilla cuando se supo que había creado irregularmente un puesto de profesora para su hija, Anais Moreno Malpartida, licenciada en Ciencias de la Comunicación.

«La Junta no tiene ningún interés en informarnos, claro», admite Martínez, «pero tenemos los medios parlamentarios para obligarles». Cuando el PP presente esa solicitud de información para esclarecer este escándalo, «el Gobierno regional tendrá como mucho un mes para contestar, tienen la obligación», recuerda.