España
UNIDAS PODEMOS

Podemos teme la ruptura en el Congreso si diputados afines a Díaz apoyan el ‘sí es sí’ del PSOE

Yolanda Díaz no se ha pronunciado tras la decisión de Sánchez de reformar la ley del 'sólo es sí es sí' de forma unilateral

Yo con Díaz, tú con Belarra: la pelea entre las ungidas por Iglesias que rompe a Unidas Podemos

El PSOE presenta sin Podemos su propuesta de reforma de la ley del ‘sólo sí es sí’

  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

Hay miedo en Podemos a que antes de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo se rompa el grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso. Que antes de esa fecha se visualice que Yolanda Díaz y los de Ione Belarra van por caminos distintos. Que no son lo mismo. Todo, según admiten en la formación morada, a cuenta de la Proposición de Ley del PSOE para modificar el sólo sí es sí de la ministra de Igualdad, Irene Montero. Los podemitas incluso acusan a sus socios de haber roto la negociación para ahondar en la fractura que ya existe entre ellos y Díaz. Temen a que prácticamente la mitad de sus parlamentarios, los más cercanos a la vicepresidenta y que de facto ya trabajan para Sumar, apoyen la propuesta de los socialistas que Podemos rechaza.

Hace meses que el grupo parlamentario está dividido. Desde la marcha de Pablo Iglesias. Pero hasta día de hoy, pese a la salida al grupo mixto de la diputada canaria María Carmen Pita por discrepancias con la dirección, nadie ha roto la disciplina de voto. Algo que podría ocurrir este mismo mes de febrero por la reforma de la ley del sólo sí es sí. Yolanda Díaz guarda silencio sobre si apoya o no la decisión de Pedro Sánchez de enmendar la norma de Montero. Un silencio tan revelador como incómodo para algunos. En plena negociación para la elaboración de una candidatura conjunta liderada por la vicepresidenta segunda de cara a las próximas elecciones generales, que colocaría precisamente a Montero y Belarra en puestos de la lista que no les aseguraría su reelección, la falta de apoyo de Díaz a la titular de Igualdad es muy criticada internamente.

La ruptura que podría provocar este movimiento de los socialistas dejaría prácticamente sin opciones la candidatura conjunta de Podemos y Sumar. Algo que muchos hace días que admiten en público y en privado. Aunque la versión oficial es que seguirán trabajando para no dividir a la izquierda. Pero hay pocas expectativas en que eso vaya a ser así. Y en Moncloa y en Ferraz se decantan por favorecer a Díaz de cara a la suma necesaria para la reedición de la coalición. Y es que aunque por ahora nadie prevé la ruptura del pacto que sustenta al Gobierno de Pedro Sánchez, si finalmente Montero y Belarra se cansan o el presidente se cansa de ellas y las cesa, mantendría a la vicepresidenta segunda, Alberto Garzón y Joan Subirats en su puesto. Por lo que sólo prescindiría de las dos podemitas.

Desde el Ministerio de Igualdad han alertado de que la reforma de la Ley del sólo sí es sí registrada este lunes por el PSOE en el Congreso implicaría «una segunda ola de revisiones». Es su manera de rechazar la propuesta impulsada por el jefe del Ejecutivo para revertir «los efectos indeseados» de la norma. Según los morados el texto vigente no contiene ningún error que requiera una modificación. Ayer lunes la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell avisó que la Proposición socialista «puede dar lugar a revisiones de tribunales que hasta ahora no se han revisado. No es cierto que la propuesta del PSOE vaya a blindar frente a revisiones que tendrían que estar terminando, no se puede permitir que vuelva a empezar una segunda ola de revisiones».

Rosell ha mostrado su «preocupación» debido a que ante un modelo de consentimiento «se introduzca de nuevo la violencia, la intimidación, que responden al modelo del ‘no es no’». «Hemos hecho la propuesta de que la violencia e intimidación sea un agravante. La propuesta de volver al viejo sistema que no ha funcionado nunca nos parece que sería un retroceso», ha defendido. Para la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, que compareció junto a la secretaria de Estado de Igualdad Ángela Rodríguez Pam, volver a introducir un subtipo en el artículo del consentimiento de la ley «es una vuelta al sistema anterior», lo que supone un «riesgo en revisiones futuras» de condenas.