Irene Montero: «La pandemia ha sido una impugnación al machismo»
La ministra de Igualdad, Irene Montero, considera que la pandemia del coronavirus -que ha provocado 100.000 muertos en España- ha sido «una impugnación al machismo y a los valores patriarcales».
Según Montero, el virus «ha demostrado que las reglas de juego del patriarcado y del neoliberalismo ponen en jaque los derechos fundamentales de las mujeres».
Así se expresó la dirigente podemita en el foro virtual ‘Ahora futuro’, organizado por Podemos, y que se ha estrenado con un diálogo sobre ‘Feminismos, géneros y disidencias’, en el que, además de Montero, participaron Ángela Rodríguez Pam -secretaria de Derechos LGTBI en el partido- y las políticas argentinas Paula Penacca y Mayra Mendoza.
En su intervención, y en su habitual ataque a los hombres, Montero señaló que «quien más está sufriendo las consecuencias de esta pandemia son las mujeres», aludiendo a que «llevan sobre sus espaldas el peso de los cuidados, los trabajos más esenciales y aquellos que va a costar más que se recuperen».
Asimismo, la ministra de Igualdad advirtió de que «aunque vayamos a encontrar muchas barreras, el feminismo es la vida. El neoliberalismo es la buena vida para unos pocos y el feminismo es la esperanza y la vida».
«El feminismo se va a abrir paso, es ganador. Estamos del lado justo, que permite a la gente vivir una vida que es feliz y particularmente a las mujeres», destacó.
«Toda la derecha es extrema»
Montero aprovechó para trasladar a sus interlocutoras un mensaje interesado contra la oposición política, señalando que «en España toda la derecha es extrema».
En este contexto, rechazó el concepto de igualdad que defienden desde otros partidos. «Ellas dicen ‘soy mujer y todo lo que he conseguido lo he conseguido por mí misma, no he necesitado que nadie me regale nada, la que vale, vale», criticó Montero, que consideró que «es un discurso peligroso, porque al final lo que le estás diciendo a otras personas es que si no has llegado es porque no vales».
Irene Montero se quejó de las «resistencias» para «convertir los mandatos del movimiento popular en políticas públicas» y, como es habitual en el discurso de los dirigentes podemitas, sacó a relucir las «cloacas» del Estado. «Estructuras mediáticas y parapoliciales que tienen por objeto intentar criminalizar a determinados actores políticos para que la gente no les vote», apuntó Montero.
«Si encontramos tantas dificultades a la hora de traducir esas demandas es porque queremos hacer políticas que cambien las reglas del juego. Y eso la extrema derecha no lo va a tolerar», concluyó, contando con el asentimiento de sus compañeras de diálogo.