España
MESA DE NEGOCIACIÓN

Hasta la mascarilla retrata a Sánchez: con bandera española en La Moncloa y sin ella en Cataluña

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

Los gestos dicen muchas veces más que las palabras. La reunión de la mesa de negociación entre el Gobierno y la Generalitat, este miércoles, dejó muchos detalles de claro significado. Entre ellos, la mascarilla utilizada por Pedro Sánchez. Si en la anterior reunión con el presidente catalán Pere Aragonès -el pasado 29 de junio en La Moncloa- Sánchez lucía una mascarilla con la bandera española bien visible, en esta ocasión -en Barcelona- el jefe del Ejecutivo optó por otra completamente lisa. Ni rastro de la bandera nacional.

Se da la circunstancia de que la pasada semana, durante su visita a Gijón, Sánchez sí lució esta prenda con la bandera. La misma de la que prescindió para reunirse con el presidente separatista en Cataluña. También es habitual que el presidente del Gobierno la utilice en sus citas europeas. Por ejemplo, era la que vestía durante el paseíllo de 29 segundos con Joe Biden.

Pancarta

Otro detalle llamativo es que Sánchez fue recibido en la entrada del Palau de la Generalitat con una única bandera, la senyera, ante la que se inclinó de manera respetuosa. El socialista entró andando y tuvo que pasar por debajo de la pancarta con el lema ‘Libertad de opinión y expresión’ que cuelga del balcón del edificio desde la época del ahora inhabilitado Quim Torra. Pere Aragonès le esperó dentro y fue el mayor de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, quien salió a recibirle.

La bandera española sí estuvo presente después en la reunión entre Sánchez y Aragonès, así como en la de sus respectivas delegaciones. También en la rueda de prensa que luego ofreció el presidente socialista. Sin embargo, fue retirada poco antes de la intervención de Aragonès. Un bedel procedió a retirarla, dejando únicamente la senyera.

Sánchez y Aragonès se reunieron a solas durante casi dos horas, antes de dar paso a sus respectivas delegaciones. Después, en su comparecencia, el presidente socialista celebró que la mesa de negociación debe trabajar «sin prisa pero sin pausa y sin plazos» frente al ultimátum de dos años que el separatismo fija para un referéndum. Sánchez confió en llegar a una «solución pactada».

Por su parte, Aragonès se jactó de haber conseguido «que el Estado español se siente en una mesa de negociación». «Hemos reiterado el reconocimiento institucional mutuo y hemos constatado que estamos ante un conflicto político cuya solución debe ser refrendada por la ciudadanía», destacó después el separatista. El presidente catalán avisó a Sánchez de que «no ha terminado la criminalización del proceso independentista», exigiéndole «el fin de la represión».