España
GUERRA A LA CARNE

Garzón ataca a la carne mientras su Gobierno dispara un 41% la contaminación con su modelo energético

Alberto Garzón ha lanzado su última cruzada contra la carne. El propio Pedro Sánchez y su ministro de Agricultura, Luis Planas, preparaban ya un golpe a la ganadería. La ofensiva responde, supuestamente a la necesidad de recortar las emisiones contaminantes de las grandes granjas. Y, en medio de esa euforia verde, se han plasmado los datos oficiales de emisiones contaminantes de CO2 en 2021 procedentes del sector más retocado y reformado por este Gobierno: el de la generación de electricidad. Y resulta que las medidas puestas en marcha por el Gobierno verde de Sánchez y Garzón han provocado una escalada en las emisiones contaminantes de un 41,45%. Todo un aval para abordar el ataque a la ganadería.

Sánchez se vende como el apóstol de las energías verdes. Garzón como el ministro de la reducción de las emisiones contaminantes de CO2. Pero sus datos dicen exactamente lo contrario. Y es que el año estrella en la incorporación de energía fotovoltaica al sistema, y el gran año de las reformas eléctricas del Gobierno socialcomunista, se ha cerrado con un aumento de las emisiones de CO2 producidas en la generación de electricidad en España de un 41,45%.

Los datos oficiales son elocuentes. Y no afectan sólo al último año. El año 2019, en plena celebración de elecciones generales, se despidió con dos datos mensuales de emisiones de CO2. Noviembre de 2019 cerró con una emisión de 2.927.826,389 tCO2 eq (toneladas de CO2 equivalente, medida para calcular la huella de carbono). Y diciembre con un total de 2.317.141,792 tCO2 eq.

Emisiones de CO2 equivalente de 2020. (Click en la imagen para ampliar)

Enero de 2020, ya con el nuevo Gobierno socialcomunista al frente y sentado en La Moncloa comenzó con una subida hasta las 2.992.938,728 toneladas. Y cerró diciembre de 2020 con 2.109.883,491. Pero las fechas en las que Sánchez tuvo que enfrentarse a las grandes escaladas de precios de la luz registraron igualmente un cambio de tendencia en materia de emisiones de CO2. Fueron las fechas en las que Sánchez igualmente lanzó sus cambios normativos en materia eléctrica.

Frenar la subida de la luz

Esas reformas legales, supuestamente iban a frenar la subida de los precios de la electricidad, cosa que no han logrado. Pero sí se ha producido otro fenómeno: el de la escalada de las emisiones bajo mando de aquéllos que aseguraban que su sistema reduciría la contaminación de forma drástica. Septiembre de 2021, de hecho, registró una emisión de CO2 de 2.922.471,915 toneladas equivalentes. Octubre de este mismo año escaló hasta las 2.782.282,636 tCO2 eq. Y noviembre ha cerrado con 3.576.895,55. Todo ello supone una subida del 54,4% desde diciembre de 2019 hasta noviembre.

Y también están ya los datos cerrados del año 2021. Las emisiones cerraron diciembre de 2020 con 2.717.438 tCO2 eq. Y han terminado diciembre de 2021 con 3.843.863 tCO2 eq. Es decir, que el gran éxito en el control de las emisiones contaminantes se ha traducido en un aumento de la contaminación por generación eléctrica de un 41,45%.

Es más, ese dato se puede haber visto alterado por periodos de mayor demanda o distinta generación. Pero lo cierto es que tampoco el dato de eficacia beneficia al Gobierno. En diciembre de 2020, las emisiones contaminantes alcanzaron las 0,11 tCO2 eq por cada MWh generado. Y en diciembre de 2021, ese mismo dato ascendió hasta las 0,16 tCO2 eq/MWh. Un nuevo fracaso con un aumento de la contaminación de un 45%. Y la explicación es sencilla: España está teniendo que parchear las necesidades de electricidad con una gran generación basada en quemar gas natural e, incluso, carbón.