España
Memoria Histórica

La Fundación del Lenin español ha recibido 500.000 € en subvenciones en los últimos 10 años

La Fundación Largo Caballero, vinculada al sindicato UGT, ha recibido más de 500.000 € en subvenciones durante los últimos 10 años. La asociación fundada en 1978 y cuyos objetivos -análogos a los recogidos en los Estatutos de la Fundación Francisco Franco pero de signo contrario- apelan, entre otros, al «reconocimiento, divulgación y recuerdo (…) de la figura de Francisco Largo Caballero», recibió sólo en 2009, de manos del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, más de 200.000 €. 

La partida fue concedida para la ejecución del proyecto de la Fundación “Archivo Oral del Sindicalismo Socialista” que se propuso recopilar, a lo largo de varios ejercicios, hasta 50 testimonios orales de protagonistas y militantes del entorno del socialismo español basados en recuerdos y experiencias personales del guerracivilismo y bajo la dictadura franquista.

En 2010 percibiría un grueso de 29.649,13 € del Ministerio de Presidencia. Y desde 2014 hasta la actualidad, un total de 16.430,50 € por los siguientes conceptos: 5.000 € en 2014 del Ministerio de Educación (Secretaría de Estado de Cultura) para la «promoción de la lectura y las letras españolas»; 5.000 € en 2015 de la misma entidad y objetivo; 2.794,02 € en 2016 del Ministerio de Defensa (Secretaría General de Política de Defensa) para la «promoción de la cultura de defensa» y 3.636,48 € en 2017 de la Dirección General de Bellas Artes y Patrimonio Cultural para la «mejora de instalaciones y equipamientos de sus archivos».

Largo Caballero, secretario general de UGT cuando se declara la Guerra Civil, y a quien se conocía como el Lenin español, tomó la decisión de armar a las milicias populares que terminaban dando el «paseo» a los discrepantes.

El Gobierno de Largo Caballero introdujo, además, en marzo de 1937, la primera cartilla de racionamiento que ha existido en España, aprobó la salida del oro del Banco de España -dirigido entonces por su camarada Juan Negrín- con destino a la URSS y apoyó la concesión del estatuto de autonomía al Gobierno vasco.

Hasta la fecha las subvenciones destinadas a las «actividades relacionadas con las víctimas del franquismo y la Guerra Civil»- tal como recoge y asigna el BOE desde la aprobación del texto de la Ley de Memoria Histórica del Gobierno socialista de Zapatero- se han destinado mayoritariamente a la propaganda ideológica.

Las ayudas percibidas por las asociaciones encargadas de la «Memoria Histórica – de las que han sido beneficiarios sindicatos, fundaciones afines al bando republicano y asociaciones vinculadas a la izquierda- se han destinado a la financiación de actividades y publicaciones. Sólo un tercio de las mismas han ido orientadas a la identificación de restos de las víctimas de la Guerra Civil en fosas comunes y a la exhumación efectiva de los mismos.

Otras fundaciones comunistas

El ejercicio 2009 ha sido uno de los más generosos en la concesión de ayudas públicas a fundaciones vinculadas a ideologías comunistas y encargadas del proselitismo de líderes marxistas leninistas.

El Partido Comunista de España fue agraciado con 10.800 € concedidos para la producción de una publicación divulgativa.

La Fundación de Investigaciones Marxistas, vinculada al mismo, percibió en dicha fecha 1.800 €, mientras en su página web promueve homenajes al Che Guevara y organiza actividades conmemorativas por el centenario de la Revolución Rusa -que desembocó en la dictadura de Lenin durante la que más de un millón de personas fueron asesinadas por motivos políticos o religiosos, en el período cruento de la misma (1918-1922) bautizado como del Terror Rojo-. En 2014 percibió 1.400 € para el «equipamiento informático del archivo histórico del PCE»

En el mismo año, la Fundación de Estudios Socialistas Federico Engels sería adjudicataria de 25.000 € para su proyecto «Crisis Política y Revolución Social en la España Republicana entre 1936 y 1939» y la Fundación Domingo Malagón dispondría de 45.565,00 € públicos para los «recuperados represaliados y lugares de represión».