El ‘feminista’ Podemos admite en su memoria que no tuvo plan de Igualdad hasta el año pasado

Ni paridad ni plan de Igualdad. Podemos ha admitido en su memoria del 2019 que no elaboraron un plan para asegurar las buenas prácticas con la mujer hasta el pasado año, a pesar de sus reivindicaciones feministas y sus exigencias para las empresas.

En marzo del pasado año el partido amenazó a las empresas que dependiesen de dinero público de cortarles el riego financiero si éstas no cumplían con una estricta ley de paridad. Esta idea se basaba en la modificación de la Ley orgánica 3/2007 de Igualdad entre mujeres y hombres para pasar del «puro fomentar y recomendar a exigir».

La medida de Podemos perseguía la «paridad real en los órganos públicos», especialmente en aquellos órganos que son clave en la Administración Pública, como por ejemplo, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Sin embargo, y a pesar de estas exigencias, el partido reconoce en la memoria de 2019 que la formación no contaba con un plan de Igualdad hasta ese año.

Tal y como puede consultarse en el punto 3.1.2 de su informe de control interno, Podemos comunica que en ese ejercicio se había «comenzado la elaboración del plan de Igualdad».

Además, confiesa que el análisis de «las circunstancias en cuanto a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres dentro de la organización» han de mejorar porque tienen que «ser capaces durante los próximos ejercicios, de crear mecanismos que mejoren los ratios obtenidos».

Falta de paridad

La paridad en Podemos no existe. No lo hacía antes ni tampoco en el año 2019, cuando afirman haber elaborado su plan de Igualdad.

A pesar de la creación del plan, en las cuentas anuales consolidadas a cierre de año se aprecia que el partido morado tiene más hombres que mujeres en plantilla.

En la tabla «Resumen de personal a 31 de diciembre de 2019», Podemos reconoce que tiene 120 hombres en plantilla frente a 101 mujeres.

Precariedad laboral

Del mismo modo, Podemos tiene más trabajadores temporales que indefinidos. El combate contra la temporalidad laboral siempre ha sido otra de las grandes banderas de los morados. La lucha contra la contratación ‘precaria’ ha estado incluida en todos sus programas electorales y ha formado parte de su discurso más recurrente.

En junio del pasado año, Podemos presentó en el Congreso de los Diputados una proposición de ley para restringir al máximo la temporalidad en el empleo. Para ello, propuso limitar las causas por las que se justifican este tipo de contratos. En su proyecto incluía la limitación de la duración de los contratos temporales, partiendo de la premisa de que un contrato de trabajo siempre debe ser de una duración indefinida.

Pérdida de donaciones

Pero las cuentas del partido han reflejado muchos otros datos nada halagüeños para el partido. En un solo año Podemos ha recibido un 20% menos de donaciones de sus militantes. Todo ello a pesar de las campañas de afiliación que la formación ha lanzado.

En el año 2019 el partido recaudó 792.648 euros en cuotas y donaciones, mientras que durante el anterior habían conseguido 984.850 euros. Esto supone un descenso de este tipo de ingresos en 192.202 euros.
Este 20% de diferencia en tan solo un año refleja el hartazgo de muchos militantes morados que también lo dejaron claro en las urnas donde las cuatro elecciones que se celebraron durante el año 2019 (europeas, autonómicas, municipales y generales) supusieron un batacazo para Podemos.