España
'ESCOLTAGATE'

La escolta-recadera revela al juez que Montero también usó como niñera a una asesora a sueldo de Podemos

Elena González, ex escolta de Irene Montero a quien la ministra de Igualdad utilizaba como recadera y chófer de la familia, ha acudido por fin a declarar ante el juez que investiga a Podemos por financiación ilegal. En su declaración, la testigo ha desvelado al juez que Montero también usó a una asesora a sueldo de Podemos como niñera. Se trata de Gara Santana, novia de Rafael Mayoral, que actualmente es jefa de prensa del partido y redactora del diario de Dina Bousselham, el panfleto que Pablo Iglesias utiliza para atacar a los jueces que investigan su corrupción y a los periodistas críticos con el Gobierno.

La ex escolta y recadera ha manifestado que la pareja de Mayoral desatendía sus funciones como jefa de prensa de los morados porque «estaba dedicada al trabajo personal de Irene Montero», ha señalado. Según ha podido saber en exclusiva este periódico, González ha añadido que «empleados de Podemos se quejaron porque Gala Santana no hacía su trabajo y éste recaía en el resto de trabajadores». Por tanto, Montero utilizó no sólo a la ex diputada podemita Teresa Arévalo, hoy en el gabinete de la ministra, como cuidadora de sus hijos, sino también a la novia de Mayoral, a sueldo del partido.

La pareja de Mayoral

Rafa Mayoral mantuvo una breve relación con Irene Montero antes de que ésta se convirtiera en la pareja oficial de Pablo Iglesias y, más tarde, ministra de Igualdad. La actual pareja de Mayoral es la canaria Gara Santana que desde entonces, como es habitual en Podemos, no ha dejado de ascender en la estructura del partido.

Tras aterrizar en Madrid en 2015 de la mano de Victoria Rosell, Gara Santana se convirtió en la jefa de prensa de Irene Montero y, ya como pareja de Rafa Mayoral, se incorporó al gabinete de prensa de Podemos en el Congreso de los Diputados. En la actualidad, la web de Podemos sitúa a Santana como responsable de comunicación del partido junto a Laura Casielles y María de Vigo.

Gara Santana aparece actualmente en la web de Podemos como miembro del gabinete de prensa del partido.

Declaración de la ex escolta

La testigo había sido citada hasta en tres ocasiones, pero nunca había comparecido hasta hoy. Fuentes internas de los morados revelaron a OKDIARIO que la abogada de la ex escolta, Anabel Segado, había recibido presiones de Enrique Santiago, actualmente secretario de Estado para la Agenda 2030, para que Elena González no declarase en contra de Irene Montero y, por tanto, corroborase la declaración de la ex responsable de cumplimiento normativo de Podemos, Mónica Carmona.

Sin embargo, el magistrado Juan José Escalonilla, que investiga a Podemos por financiación ilegal, ha comunicado a Elena González esta última citación a través de la Policía Judicial y advirtió que, en caso de incumplimiento, –y, por ende, de no acudir a la cita judicial– la ex escolta se enfrenta a una multa de 200 euros a 5.000 euros.

Esta causa se abrió a raíz de un escrito presentado por Carmona en el que afirmó que Montero «habría estado utilizando también a una empleada del partido, Elena González, como escolta privado y como asistente personal, hasta el punto de que Montero despidió a la trabajadora cuando ésta le exigió regularizar su situación laboral, ya que no soportaba ser la recadera ni que la tratara de forma humillante».

Esta abogada, purgada junto al letrado José Manuel Calvente por investigar las irregularidades del partido morado, afirmó en dicho escrito que pidió información «sobre la contratación de esta trabajadora» el 25 de noviembre de 2019 a la gerente de Podemos, Rocío Val, y al responsable de Seguridad, Víctor Martins. «No sólo no recibí respuesta alguna a mi petición de información, sino que al cabo de una semana fui cesada en mi cargo», aseguró la letrada.

Paralelamente, Podemos compró el silencio de la escolta por 50.000 euros. Elena González había demandado al partido por «trato discriminatorio» de la actual ministra de Igualdad, pero la formación morada llegó a un acuerdo extrajudicial con la ex escolta para evitar que la ministra tuviera que ir a juicio.

‘Escoltagate’

La denunciante Carmona también afirmó que todos los miembros del partido conocían el caso porque la trabajadora denunció en varias ocasiones la situación que estaba sufriendo ante el departamento de Recursos Humanos.

La ex escolta de Irene Montero relató en un escrito ante el Juzgado Social 3 de Madrid que durante su jornada laboral, a cargo del partido morado, la pareja Iglesias-Montero le ordenaba realizar tareas como hacer compras personales, productos de parafarmacia, droguería para bebés, alimentación en supermercados, comprar y llevar la cena, comprar comida para perros, hacer de chófer de la empleada doméstica y de la niñera, hacer de chófer de familiares invitados, hacer de transporte de envíos de familiares, tareas de gestión de obras en una de sus propiedades, tareas de mantenimiento en varias propiedades, tareas de mantenimiento de vehículos personales, labores de jardinería… entre otros.

Por todo ello, el juez ha tomado declaración a la ex escolta para aclarar si Montero cometió un delito de administración desleal castigado con penas de prisión de 1 a 6 años y multa de 6 a 12 meses.