España
Elecciones generales 2019

Economía aconsejó a Sánchez adelantar el debate porque el dato de paro sería malo

Pedro Sánchez insistió en que sólo aceptaría un debate y en que tenía que ser el día 4 de noviembre. La razón, tal y como publicó OKDIARIO en su momento, respondía a la publicación al día siguiente del dato de paro mensual registrado. Y es que el Ministerio de Economía alertó al presidente de que debía esquivar un debate posterior al día 5: porque ese dato, tal y como preveían sus departamentos de análisis macroeconómico, sería claramente negativo.

El pastel ya se ha descubierto. Tan sólo horas después del debate electoral se ha publicado uno de los peores datos de paro en el mes de octubre que se recuerdan desde el año 2012, un ejercicio que aún seguía dentro de los años oficialmente reconocidos como de crisis económica. El dato que Sánchez ha conseguido esquivar como tema del debate, el del mes de octubre de 2019, recoge una subida del número de parados de casi 100.000 personas: 97.948 desempleados en octubre (+3,2%).

Se trata de la tercera subida consecutiva después de agosto y septiembre y el número total de desempleados se aleja mucho de los tres millones, alcanzando los 3,17 millones de parados, según los datos oficiales conocidos este martes de mano del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.

Pero, aunque los datos obviamente no podían ser conocidos hace un mes por el equipo electoral de Sánchez, sí era conocido el análisis macroeconómico elaborado desde el Ministerio de Economía y comunicado a los asesores de Sánchez. Un análisis que incluía el cuadro que hoy reproduce OKDIARIO y donde resulta fácil deducir la tendencia de los siguientes datos de paro.

El informe hecho público oficialmente, pese a ello, afirmaba que “se mantiene una notable creación de empleo”. Un mensaje que se lanzaba sin parar desde el Gobierno socialista. Un mensaje hiperoptimista que, sin embargo, chocaba incluso con los gráficos incorporados en el estudio. Gráficos como el que muestra ahora este diario y que revelan una tendencia claramente negativa.

Pero Sánchez no accedió sólo al informe divulgado masivamente. Él contó con la valoración personal de los datos recabados por la Secretaría General de Coyuntura y Previsiones Económicas.

Y en esa valoración sí se le alertó de la tendencia real: de que, pese a decir ante la opinión pública que las cosas marchaban bien, la realidad es que el dato de octubre de empleo mostraría una fuerte caída.

Explicaciones

Moncloa tomó nota y decidió hace un mes que lo mejor era esquivar el día de publicación del dato de paro para que el presidente en funciones no tuviese que dar explicaciones del deterioro económico. Porque el día de publicación del paro estaba prefijado en la agenda oficial y, al haberse comunicado ya ante la opinión pública, no se podía mover.

Resultado: sólo quedaba la posibilidad de realizar el debate electoral televisado antes del día 5 -el de la publicación del dato de paro-.

Puesto que la campaña comenzaba el día 1 de noviembre -viernes e inicio de puente- y el 2 y 3 eran fin de semana, sólo quedaba el día 4. Y dicho y hecho.
Pero el presidente, además, ya había sido alertado previamente de la fuerte desaceleración que niega públicamente.

De hecho, desde marzo, ese mismo departamento del Ministerio de Economía esta recabando la pérdida de fuerza de datos como la matriculación de vehículos, las exportaciones de bienes -en valor y en volumen-, las importaciones -en volumen-, el saldo comercial o la financiación del sector privado, que ha mostrado ya datos en negativo consecutivos.

Junto a estos indicadores, otros dos apuntan a una posible y cercana crisis, pese al negacionismo del Gobierno: el Índice de Confianza Industrial y el Indicador de Confianza del Consumidor. Se trata de indicadores que suelen marcar el comportamiento del consumo nacional, clave hasta ahora ante la caída de las exportaciones.