Cursos de peluquería para delincuentes peligrosos en el módulo penitenciario de madres presas con hijos

La única cárcel española que dispone de módulo específico de presas con hijos a cargo permite el acceso de internos conflictivos a sus cursos de reinserción. Fuentes próximas al sector de prisiones denuncian lo inadecuado de que presos de esa misma prisión accedan a las zonas designadas como Módulo Familiar, sin más vigilancia que un par de funcionarias y la docente que imparte la materia.

OKDIARIO ha tenido acceso al documento en el que la dirección de dicho centro penitenciario autoriza la asistencia de varios internos al curso de peluquería previsto, para su desarrollo en las instalaciones pertenecientes al recinto en el que menores de edad acompañan a sus madres presas mientras cumplen condena.

En la orden de servicio emitida se confiere a «la experta docente» la potestad de seleccionar a los presos -de entre los que figuran en un listado previo confeccionado por Instituciones Penitenciarias- que asistirán a las jornadas habilitadas, así como la obligación de informar a los funcionarios del módulo al que pertenecen todos ellos y del lugar «donde se va a desarrollar la actividad».

Dos funcionarias para un total de 20 presos, y los menores hijos de las internas, durante el curso de reinserción de peluquería

Según informan fuentes conocedoras de la realidad penitenciaria a OKDIARIO, no es habitual que se permita a presos de módulos masculinos acceder a zonas en las que puedan mantener contacto, aunque se trate de una actividad meramente académica, con mujeres.

Todavía más inusual teniendo en cuenta que todos ellos va a manipular material y utensilios de riesgo (tijeras, cuchillas, maquinillas eléctricas, …) y que hay menores en las inmediaciones. Pese a que en el contenido del documento se fija expresamente la prohibición de que puedan entrar al aula en cuestión. «Los niños y niñas del Módulo Familiar por razones de seguridad no podrán estar en ningún momento en la peluquería», establece la orden.

Sin embargo, la misma se encuentra integrada en el patio abierto del módulo femenino, de forma que los menores estarán, durante las cuatro horas que dura cada sesión del curso, en todo momento muy próximos al lugar donde sus madres y el resto de los presos realizan las prácticas.

El total de los internos que asistirán a la reinserción formativa en peluquería, un total de 12 presos hombres y otras tantas internas, serán vigilados por tan solo 2 funcionarias -que deberán controlar también los juegos y movimientos de los menores- y la propia profesora. Algo que los profesionales de la seguridad, en el interior de las cárceles, consideran insuficiente y peligroso para la integridad de las trabajadoras de prisiones y los propios reclusos.