El coronavirus deja ya 33.091 muertos tras sumar 440 en 24 horas

La pandemia del coronavirus deja, al menos, 33.091 muertos en España. Sin embargo, la cifra oficial del Ministerio de Sanidad es de 22.157. La diferencia se produce por el nuevo sistema de recuento de comunidades como Madrid y Cataluña que, en los últimos días, han disparado los datos reconocidos por Sanidad. Pese a ello, el Gobierno insiste en su criterio, que excluye gran parte de los muertos en residencias de ancianos y domicilios particulares. El departamento de Salvador Illa considera que ese sistema es «riguroso», aunque no refleja ni de lejos la magnitud de la epidemia. Según el balance de Sanidad, el incremento diario de muertes es de 440.

El Gobierno regional de Madrid cifró este miércoles en 13.911 las muertes relacionadas con el Covid-19. Se trata de 6.227 más de las que recoge Sanidad en esa comunidad autónoma.

La diferencia radica en que el Ministerio sólo recoge a los fallecidos en los hospitales a los que se hizo un test del virus, mientras que la región  comenzó a sumar además a los muertos en las residencias de ancianos, en su domicilio y en otros lugares. La Comunidad de Madrid informa además de los fallecidos en hospitales con un diagnóstico clínico de coronavirus, pero a los que no se les pudo realizar test por falta de medios, según indicó el Gobierno madrileño.

El desbarajuste también procede del nuevo sistema de recuento de la Generalitat. Este miércoles, el departamento de Salud catalán informó de un total de 9.050 defunciones desde el inicio de la epidemia. Sanidad ‘sólo’ recoge 4.343 en esta región.

El sistema de recuento en Cataluña se basa en los datos de las funerarias, que informan de 2.568 muertos en residencias, 100 en centros sociosanitarios, 536 en casa, y el resto en hospitales o son casos no clasificables por falta de información.

De esta forma, y sin tener en cuenta que algo similar ocurriría en el resto de comunidades autónomas, el balance ofrecido por Sanidad queda lejos de reflejar el auténtico drama de la pandemia.

Por otro lado, los casos confirmados también suben. Se añaden 4.635 positivos en un día (frente a los 4.211 de este miércoles) lo que eleva a 213.024 los casos confirmados.

A ello hay que sumar otros 1.511 casos positivos pero asintomáticos, lo que da un total de 214.535 positivos.

Con este escenario, sin embargo, el Gobierno comenzará el plan de desconfinamiento, que se iniciará con las salidas permitidas de los menores de 14 años, acompañados de un adulto.

El Congreso autorizó este miércoles una nueva prórroga del estado de alarma, la tercera, aunque Pedro Sánchez encontró una oposición firme a su gestión de la crisis.

El presidente socialista defendió sus políticas aunque admitió que no tiene un plan claro para la desescalada. «Se darán pasos hacia adelante y hacia atrás», asumió. Sánchez, pese a los datos trágicos, se mostró «prudentemente optimista» y afirmó que «vislumbra» una vuelta a la normalidad que debería comenzar a mediados de mayo. Sí avisó que se tratará de una «nueva normalidad».

Por su parte, el líder de la oposición, Pablo Casado, mostró un rechazo rotundo a la gestión, y apoyó la prórroga aunque con serias advertencias.

«Esto no es una guerra, es una hecatombe», aseveró Casado al inicio de su intervención, en la que reprochó que Sánchez no hubiese hecho «referencia a las víctimas».

Casado requirió al socialista «disculpas por sus errores», como el retraso en la aplicación de las medidas de confinamiento o las compras de test ‘fake’ y avisó que el coronavirus se ha cebado «con los Gobiernos más incompetentes». El presidente del PP le acusó además de «buscar chivos expiatorios» para justificar su cuestionada gestión de la crisis y arremetió contra la orden a la Guardia Civil de vigilar las publicaciones que generen «desafección» con el Gobierno. «Usen mascarillas y no mordazas», reprochó.