España
LA EMT RECONOCE LA SITUACIÓN

Carmena tiene decenas de autobuses sin estrenar guardados en las cocheras

El Ayuntamiento de Madrid tiene decenas de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) sin estrenar en las cocheras a la espera de instalar la tecnología necesaria para que empiecen a circular.

Los sindicatos aseguran que hay «120 vehículos acumulando polvo» en los centros de operaciones. «En los centros de Fuencarral y Carabanchel hay alrededor de 120 autobuses a estrenar, cogiendo polvo en las pistas. Y lo peor de todo es que algunos van a estar parados 4 meses por no tener la tecnología instalada», lamentan desde Plataforma Sindical.

«¿Cómo es posible que cuando este Ayuntamiento hace un esfuerzo inversor para recuperar una flota digna para la EMT, haya autobuses nuevos que estén meses sin prestar servicio a la ciudadanía y perdiendo tiempo de garantía?», se preguntan.

Los conductores lamentan que siguen teniendo problemas en la calle con los vehículos que dejaron Gobiernos anteriores. Sobre todo, porque se incendian de repente. Cargan contra el director de tecnología de la EMT como «máximo responsable de que la empresa instaladora de la tecnología de a bordo vaya a un ritmo de entre 7 y 10 coches por semana».

Buses a la venta y sin recoger

Además de los buses nuevos cogiendo polvo, hay otros 60 vehículos viejos dados de baja y amortizados, que «pasan meses y meses ocupando espacio y esperando que la dirección de Comunicación y Consultoría decida ponerlos a la venta».

Otros ya han sido vendidos y los compradores tardan meses en venir a buscarlos. La explicación: que la Dirección al sacar los pliegos no incluyó ninguna cláusula de penalización al respecto. Esto supone que más de 70 plazas de aparcamiento que usaban trabajadores no puedan ser utilizadas.

Fuentes de la EMT consultadas por OKDIARIO confirman que esta situación se está dando. «El proceso de preparación de los autobuses nuevos desde que llegan hasta que pueden salir es prolijo, sobre todo desde el punto de vista tecnológico», defienden. Todos los autobuses llevan un complejo sistema de tecnología: sistema de video vigilancia, WiFi, geoposicionamiento, sistemas de información al usuario, conexión al Centro de Control, ticketing, sistemas de validación, etcétera.

La instalación y adecuada puesta en funcionamiento requiere unos tiempos determinados. Los autobuses se envían por grandes lotes de varias decenas semanales. La complejidad de los sistemas tecnológicos no permite trabajar al mismo ritmo de la llegada de vehículos nuevos, aseguran.

Fernández Heredia recientemente presentando una línea eléctrica. (Foto: Madrid)

Por otra parte, además, este año, se está migrando a un nuevo sistema tecnológico más avanzado por lo que el ritmo de implantación se ha ralentizado hasta tener garantías de que el sistema funciona al 100% sin fallos.

En estos momentos, explican desde la EMT, se han reforzado los recursos destinados a esta tarea de modo que se alcanza un ritmo superior a los 60 autobuses mensuales. Por tanto, preven que todos los autobuses nuevos estarán incorporados al servicio a lo largo de febrero y marzo. Aseguran que los plazos de adaptar los 2.000 buses adquiridos «se están cumpliendo como estaba previsto».

«Viejas formas y parásitos»

Los sindicalistas se muestran muy críticos con los responsables. «Estamos seguros que con su dinero personal no actúan igual», expresan. La Gerencia de EMT debe, según ellos, tomar acciones encaminadas a solucionar esta falta de implicación con la EMT, «antes de que esta actitud se convierta en una epidemia y se enquiste».

Piensan que el Gerente, el imputado Álvaro Fernández Heredia, es una persona «comprometida con lo público», pero que «si sigue manteniendo una actitud de ‘buenismo’, no va a conseguir que por sí solo desaparezcan estas conductas y que de una vez por todas en la EMT, se consiga erradicar las viejas formas y algún que otro parasito». «La incompetencia se asienta en los despachos de algunos directores, sus decisiones perjudican la imagen de la EMT y generan problemas a los trabajadores», zanjan.