Ayuso combate la regulación del cannabis de Mónica García: multará con hasta 600.000 € su venta a menores

El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso multará con hasta 600.000 euros la venta de cannabis y sus derivados a menores de edad. La batalla de la presidenta de la Comunidad de Madrid contra las drogas ya se materializó el pasado mes noviembre con una batería de más de 70 medidas. Ahora, Ayuso endurecerá las sanciones por la venta y publicidad de estos productos con el objetivo de «proteger a la infancia». Una postura que choca frontalmente con la de Mónica García, que como líder de Más Madrid defendía la legalización del cannabis y, como ministra de Sanidad, ha aprobado su uso medicinal.

Así costa en el Anteproyecto de Ley por la que se modifica la Ley 5/2002, de 27 de junio, sobre Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos, que tiene como objetivo adecuar la regulación de los dispositivos susceptibles de liberación de nicotina, de los cigarrillos o dispositivos electrónicos sin nicotina y de los cannabinoides, enfocado en la protección de la salud de las personas menores de edad.

«La exposición temprana a cannabinoides ha sido motivo de atención debido a sus posibles impactos en el desarrollo cerebral, comprometiendo funciones cognitivas y aumentando el riesgo de trastornos psiquiátricos en la edad adulta. Diversos estudios han demostrado la asociación entre consumo de cannabis en jóvenes y problemas mentales», reza el texto sometido a audiencia pública. Por estos motivos, unido a que los contenidos y concentraciones de los mismos muchas veces no son conocidos, desde la Comunidad de Madrid aseguran que es pertinente restringir el acceso a estos productos en los menores de edad.

Así, esta normativa prohíbe la venta a personas menores de edad de productos con cannabinoides, componentes o derivados en cualquier establecimiento o a través de máquinas expendedoras, dispensadores móviles o portátiles. El incumplimiento de esta prohibición se califica de infracción muy grave, que según la ley que modifica el anteproyecto, supondría multas que van desde los 60.102 euros hasta los 601.012 euros.

Además, Ayuso también pone el foco en la publicidad del cannabis y sus derivados. «Se prohíbe en todos los medios de comunicación autonómicos, incluidos los servicios de la sociedad de la información, la emisión de programas y series de producción propia o de imágenes en los que las personas presentadoras, colaboradoras, invitadas y participantes mencionen o muestren, directa o indirectamente, imágenes, o cualquier signo identificativo asociado a los productos con cannabinoides, componentes o derivados. También se prohíbe la publicidad de estos productos en los videojuegos distribuidos en el territorio de la Comunidad de Madrid», reza el texto. En este caso, el incumplimiento de esta normativa acarreará una multa de entre 30.051 y 60.101 euros, al tratarse de una infracción grave.

Por su parte, el real decreto sobre el uso de cannabis en España, que ha salido a consulta pública recientemente, pretende que se utilice el cannabis como un tratamiento más dentro del arsenal terapéutico y, según la ministra de Sanidad, avalado por la evidencia científica, pero hasta el momento no se ha evidenciado el informe de la Agencia Española del Medicamento. Ya como líder de Más Madrid, Mónica García exigía a Ayuso a través de una iniciativa en la Asamblea de Madrid que realizase una «regulación responsable en adultos del cannabis».

Ayuso contra el cannabis

El pasado mes de noviembre, Ayuso presentaba el nuevo Plan Regional Antidrogas de la Comunidad de Madrid 2024-2027. El Plan, con 4 años de vigencia, va destinado especialmente a los jóvenes y está compuesto por 75 medidas. Para el mismo, se destinarán 200 millones de euros y para su elaboración han participado de manera conjunta todas las consejerías del Gobierno e incluye una campaña de comunicación institucional muy potente. Se trata del plan más completo y ambicioso contra las drogas que realiza una administración en los últimos años.

En el ámbito de la prevención, el plan antidrogas tendrá mucha presencia en los centros educativos. Contempla un nuevo programa de prevención del uso de cannabis y derivados en estos centros y también se dotará a colegios e institutos de materiales didácticos para concienciar a los menores sobre el uso de estas sustancias. Además, el programa prohíbe la venta de estos productos a menos de 300 metros de centros educativos de enseñanza no universitaria y restringe cualquier tipo de publicidad relacionada con el cannabis.

En el ámbito de la asistencia y atención, el plan recoge medidas orientadas al asesoramiento de los afectados. Se creará una unidad de patología dual para pacientes con trastornos mentales y adictivos, un nuevo servicio de atención 012 «Contra las Drogas», y una nueva regulación de las condiciones para la contratación del servicio de atención residencial para menores con adicciones graves. Además habrá un refuerzo de la unidad de ingreso y hospital de día de desintoxicación y deshabituación para adolescentes y jóvenes y más asistencia sanitaria a drogodependientes a través de unidades móviles.