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Alerta en el PSOE: «Nos hace más daño la bragueta de Paco Salazar que la de Ábalos»

Miembros del PSOE temen el efecto devastador en el voto femenino del «caso Salazar»

  • Esther Jaén
  • Corresponsal política en OKDIARIO. Colaboradora y analista política en radio y televisiones. Te leo en esther.jaen@okdiario.com

La alarma ha cundido en la familia socialista tras el estallido del escándalo en torno a la persona Francisco Salazar, el ex dirigente y ex asesor del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y las denuncias por acoso sexual contra su persona. Algunas de las mujeres del partido consideradas «feministas clásicas» advierten que la mala gestión y el presunto encubrimiento de las denuncias de trabajadoras del equipo de Salazar son demoledoras para la imagen del PSOE. En palabras de una de las consultadas, «nos hace más daño la bragueta de Paco Salazar que la de Ábalos y el resto de casos».

Mujeres del PSOE, pero también otros dirigentes consultados, admiten que el caso Salazar «nos hace mucho daño, electoralmente hablando» y añaden que no se puede pedir el voto feminista cuando hay sospechas más que fundadas de que ha habido voluntad de encubrir o diluir las denuncias de varias mujeres que se han sentido acosadas por el ex fontanero de Moncloa.

Por otra parte, desde algunas federaciones socialistas advierten de lo mucho que puede perjudicar esa imagen de «machirulo consentido» que se está trasladando hacia la opinión pública de Paco Salazar y añaden que llueve sobre mojado, puesto que el descubrimiento de las andanzas del ex ministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García Izaguirre supuso ya una profunda disuasión, cuando no rechazo, por parte del voto femenino, que supone un porcentaje importante dentro de los caladeros electorales del PSOE.

Las actitudes descritas en las denuncias resultan «vomitivas» para la ministra portavoz, Pilar Alegría, pero en cierto sector del partido no se entiende qué hacía la ministra en un restaurante, compartiendo mesa y mantel con Salazar, después de que hubiesen aparecido ya las primeras informaciones sobre su conducta ante las trabajadoras que, generalmente, estaban bajo el mando del ex asesor monclovita.

En el PSOE hay quienes sospechan de un encubrimiento que va a resultar «letal» para el conjunto del PSOE y critican en privado la gestión que el partido ha hecho de esta crisis, que, en su opinión, «erosiona profundamente nuestra credibilidad y el trabajo que hemos estado haciendo durante años» en defensa de las mujeres y de la lucha por la igualdad.

Brecha en el PSOE

Mientras ministras como Alegría o la vicepresidenta María Jesús Montero prefieren no echar más leña al fuego sobre la nueva crisis que azota al PSOE, antiguos miembros del Gobierno y de la estructura del partido se lamentan de que las actitudes de Salazar se veían venir, pero nadie cogió el toro por los cuernos porque era «uno de los hombres fuertes del entorno de Sánchez».

La cuestión es que el caso Salazar ha abierto una brecha dentro del PSOE, entre aquellos que intentan achicar agua por todos los medios y apuestan por  investigaciones internas mientras esperan que amaine el temporal  y aquellos que piden medidas ejemplares, como llevar ante la Fiscalía las denuncias por supuestos abusos y acoso de Paco Salazar, como ya ha pedido la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra, quien fuera vicesecretaria general del PSOE. La de Lastra es, a día de hoy, la única voz que se ha alzado en público para pedir esa contundencia, pero son muchos en el PSOE que suscriben en silencio sus exigencias.