Abascal juntará a Orbán y Le Pen en Madrid en una cumbre de «patriotas europeos»
El presidente de Vox, Santiago Abascal, se reunirá este fin de de semana en Madrid con, entre otros, el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, el de Polonia, Mateusz Morawiecki, y la líder de la formación francesa Agrupación Nacional, Marine Le Pen. Se trata de una cumbre de «patriotas europeos» que se celebrará en la capital los días 28 y 29 de enero.
Esta Cumbre de Madrid es una continuación de la Cumbre de Varsovia, que se celebró el pasado mes de diciembre. «El objetivo de este encuentro es continuar con el trabajo iniciado durante la Cumbre de Varsovia: defender Europa de las amenazas exteriores e interiores, impulsando una alternativa que haga frente a la deriva globalista, que amenaza a la Unión Europea atacando la soberanía de las naciones», señalan desde la formación de Abascal.
Otros dirigentes que acudirán a esta reunión serán Marlene Svazek (Austria), Tom Van Grieken (Bélgica), Krasimir Karakachanov (Bulgaria), Martin Helme (Estonia), Valdemar Tomasevski (Lituania), Rob Roos (Países Bajos) y Aurelian Pavelescu (Rumanía).
Santiago Abascal ha recalcado que «todos los políticos que nos reunimos en Madrid tenemos grandes coincidencias en el diagnóstico de los desafíos de Europa y voluntad de colaboración para construir una Unión Europea fuerte de naciones soberanas que colaboren libremente». «Debemos proteger nuestras fronteras, nuestra soberanía y nuestras raíces. Europa tiene que ser fiel a sí misma. La mayoría de los europeos así lo exige», apostilla.
La declaración firmada
El pasado mes de junio, 15 partidos de 14 países firmaron una declaración conjunta en la que reclamaban a la UE una estrategia «basada en la soberanía de sus estados miembros» y rechazaban «su actual deriva federal». Esta declaración continuó el pasado mes de diciembre con la Cumbre de Varsovia.
Los principales dirigentes de los partidos firmantes apoyaron al primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki, frente al ataque contra su frontera que realizó el Gobierno de Bielorrusia.
«En los países miembros sigue existiendo una abrumadora voluntad de cooperación, y un espíritu de comunidad y amistad impregna las naciones y sociedades de nuestro continente. Es nuestro gran capital. Una Unión reformada hará uso de este capital, mientras que una Unión que rechace la reforma lo dilapidará», recoge el texto firmado.
También se instó a las instituciones europeas a «desempeñar un papel subordinado en la arquitectura política al Estado nacional» y a comprometerse a mantener «mecanismos de cooperación» a través de la celebración de nuevas cumbres como la que tendrá lugar este fin de semana en Madrid.