El PSOE apoya mociones de los proetarras a favor del acercamiento en varios ayuntamientos vascos

La iniciativa del Gobierno de trasladar a presos etarras a cárceles próximas al País Vasco discurre en paralelo al debate, en decenas de ayuntamientos vascos, de mociones que reflejan la alianza del PSOE con PNV, Bildu y Podemos. 

En estos textos -apoyados también por sindicatos del entorno proetarra  como LAB o la red Sare- se insta a un cambio en la política penitenciaria, poniendo la prioridad en el acercamiento de los encarcelados a prisiones cercanas a sus lugares de origen. Algunas de esas iniciativas han sido propuestas directamente por el PSOE.

La última, en el Ayuntamiento de Eibar -gobernado por los socialistas- reclama «una nueva política penitenciaria que evite un cumplimiento de penas privativas de libertad lejos de los lugares de arraigo social y familiar».

En abril, el partido se sumó también a una iniciativa del Foro Social Permanente -asociación en defensa de los presos terroristas- en la que se reclamaba el fin de la dispersión. El texto, suscrito por Bildu y Podemos, y apoyado por PNV y PSE, subrayaba la necesidad de acabar con el alejamiento en «el nuevo tiempo abierto tras el cese definitivo de ETA», e insistía en la reinserción de los presos. La iniciativa fue rechazada por el PP en una sesión, en la Cámara Provincial de las Juntas de Álava, a la que asistieron también miembros de Etxerat, asociación vinculada al entorno carcelario de ETA.

Votación en el Parlamento Vasco

El punto de inflexión se produjo el pasado 13 de junio, cuando el Parlamento vasco, con la única oposición del PP, aprobó un texto de EH Bildu en favor del fin del alejamiento y defendiendo el «reconocimiento del daño causado» para avanzar en materia de «convivencia».

En la iniciativa se expresaba el «desacuerdo» con la política penitenciaria de alejamiento y con las medidas «excepcionales de aislamiento» que se aplican a los presos vascos. Y, como en las mociones municipales, se proponía una nueva política «que evite un cumplimiento de penas privativas de libertad lejos de los lugares de arraigo social y familiar, facilitando la relación con sus familiares».

Desde el PSE-EE, Rafaela Romero destacó que partido «ha defendido siempre» la conveniencia de acabar con la política de alejamiento, y consideró que ello supone «el cumplimiento del ordenamiento jurídico español».

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, avanzó este miércoles -en conversación informal con periodistas en el Congreso- su intención de empezar a trasladar a presos etarras, de forma individualizada, y empezando por los mayores de 70 años y aquellos que padezcan enfermedades terminales.

En los pasillos de la Cámara, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, confirmó también que el traslado se hará conforme a «un estudio personalizado de cada recluso».

El procedimiento se iniciará en las juntas de tratamiento de las prisiones, que estudiarán el caso que ocupe, y darán traslado a Instituciones Penitenciarias. La posibilidad de acercamiento será valorada conjuntamente con las asociaciones de víctimas, «caso por caso» y determinando «cuando procede o no procede».