El PSOE negocia modelos de pregunta y de reforma constitucional con Podemos

Miquel Iceta
Miquel Iceta. (Foto: EFE)

Las conversaciones secretas entre Miquel Iceta y Xavier Domènech han tenido como finalidad buscar un punto de encuentro al respecto del asunto territorial catalán que favorezca un posible acuerdo entre Podemos y el PSOE. Y para ello la clave es lograr un acuerdo sobre el plebiscito que reclaman los podemitas y las reforma constitucional que ofrecen los socialistas.

Según ha sabido OKDIARIO, ambos políticos se han reunido en diversas ocasiones en los últimos meses para intentar salvar el escollo que les separa: el referéndum independentista que los de En Comú Podem insisten en celebrar.

Según fuentes del PSC, ambos partidos entienden que tiene que haber un plebiscito pero en términos radicalmente diferentes. Los socialistas tratan de convencer a los podemitas con un referéndum a nivel nacional cuyo objetivo sea aprobar una eventual reforma constitucional de tipo federal. Además, su empeño es que la pregunta sea muy clara para que la respuesta sea un sí o un no. Pero los de Ada Colau insisten en llevar a cabo un plebiscito sólo a nivel catalán y en la que se planteen diferentes cuestiones con sus respectivas respuestas.

Según fuentes del PSC, la pregunta que los socialistas lanzarían a la ciudadanía en todo el territorio nacional sería: «¿Está usted de acuerdo con la reforma constitucional aprobada por las Cortes Generales?». Esto implicaría que la reforma ya estuviera aprobada tanto por el Congreso como por el Senado.

Por su parte, En Comú Podem insiste en hacer un plebiscito únicamente en Cataluña donde se pregunte por asuntos que tengan que ver directamente con la independencia. Según las citadas fuentes, «ellos aún no dicen qué es exactamente lo que quieren formular, aunque lo que sí saben es que no sería una pregunta binaria que se contestaría sólo con un sí o un no». Algo que para los socialistas es simplificar el problema, ya que en Ferraz creen que el problema es «más que un tema territorial» y sólo catalán, sino un problema de estructura de Estado.

Blindar la reforma con asuntos sociales

Sin embargo, los de Sánchez mantienen su optimismo y confían en su reforma constitucional ya que aseguran que, una vez queden reflejadas las demandas sociales de la formación de Colau, será difícil no llegar a un acuerdo. Desde el PSC señalan tres puntos fundamentales: «El blindaje de la sanidad pública, una nueva financiación para Cataluña y la paralización de los desahucios».

Los socialistas aseguran que lo importante es lo que ambas formaciones tienen en común, ya que aseguran que desde las pasadas elecciones autonómicas y municipales son muchos los temas a los que han votado de igual manera tanto en el Parlament como en el Ayuntamiento de Barcelona, donde incluso ambas formaciones están a punto de cerrar un acuerdo de Gobierno.

Según estas fuentes, lo que más les separa es «el planteamiento que En Comú Podem de acuerdo o ruptura». Y destacan las veces que el propio Iceta ha tenido que reconducir las conversaciones para convencerles de que hay margen para negociar. «Ellos dicen ‘si no jugamos con mis normas rompo la baraja’. Y nosotros contestamos ‘pues vamos a cambiar las normas para que el juego nos guste a todos’», aseguran.

Aunque estas conversaciones se interrumpieron en Semana Santa, en el momento en que Pablo Iglesias anunció que se reuniría con PSOE y con Ciudadanos, lo cierto es que los de Miquel Iceta no descartan «que haya una fórmula de Gobierno que inicie una reconstrucción de la relación entre Cataluña y España».

A pocos días de que se produzca la reunión entre los socialistas, Ciudadanos y Podemos y unos días después de que el propio Íñigo Errejón haya asegurado que para su partido el referéndum es «como una manera de solucionar un problema político», y que están dispuestos a «contrastar otras propuestas» siempre que tengan el mismo objetivo de «construir unidad», todo indica que para los socialistas hay margen para negociar.

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