Economía
Compañías y empresas

El volumen de negocio de las compañías de seguridad alcanzó en 2019 su máximo histórico con 4.855 millones

Las previsiones apuntan a un cambio de tendencia en la evolución del negocio sectorial, que se desplomará en 2020 tras cinco años consecutivos de crecimiento

Las compañías de seguridad generaron un volumen de negocio en España de 4.855 millones de euros en 2019, cifra un 4% superior a la del año anterior y que supuso alcanzar un máximo histórico, según el Observatorio Sectorial DBK (filial de CESCE).

En concreto, los servicios de vigilancia, a pesar de su alto grado de madurez, siguen conformando la principal área de actividad. Así, los ingresos generados por los operadores del sector en este segmento se cifraron en 2.650 millones de euros en ese año, un 1,9% más que en 2018, concentrando el 54,6% del total.

Por su parte, el valor del mercado derivado de la actividad de instalación, mantenimiento y conexión a CRA de sistemas electrónicos se incrementó un 6,3%, hasta alcanzar los 1.830 millones de euros, concentrando el 37,6% del total y actuando como principal impulsor del crecimiento del negocio.

«El mayor dinamismo del segmento de sistemas respecto al resto de áreas de seguridad privada se explica por la tendencia de sustitución de servicios de vigilancia presencial por sistemas electrónicos de seguridad y el desarrollo tecnológico, que está permitiendo la comercialización de equipos con prestaciones cada vez más avanzadas», ha apuntado el informe.

Por su parte, el mercado de transporte de fondos generó en 2019 unos ingresos de 375 millones de euros, un 7,8% más que en el año anterior, representando el 7,7% del negocio total.

Previsiones 2020

Las previsiones apuntan a un cambio de tendencia en la evolución del volumen de negocio sectorial, que se desplomará en 2020 tras cinco años consecutivos de crecimiento, por el impacto de la crisis del coronavirus en el sector.

A este respecto, el incremento puntual de la contratación para atender actividades esenciales durante los meses más críticos de la crisis sanitaria del coronavirus y el positivo impacto que actualmente tienen los nuevos protocolos de seguridad no podrán compensar el notable recorte de la demanda en ámbitos como el aeroportuario, el comercial y el de ocio.