Economía
Sector Inmobiliario

Sareb saca a Servihabitat del concurso para pujar por la gestión de su cartera de 30.000 millones

La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha preseleccionado a los cinco candidatos que pujarán por gestionar su cartera de inmuebles y préstamos a partir de 2022. Servihabitat, servicer de Lone Star y CaixaBank y con la que venía trabajando desde el año 2014, ha sido excluida del concurso.

Así, los cinco candidatos que siguen en el proceso son Solvia, Haya Real Estate, Altamira Asset Management, Hipogés y Anticipa, quienes pujarán por hacerse con parte de la gestión de una cartera que ronda los 30.000 millones y genera comisiones superiores a los 100 millones anuales.

La decisión final se adoptará en el primer trimestre de 2022, y la intención de la Sareb es reducir a dos o como mucho tres el número de proveedores o servicers que le ayude a desprenderse de su cartera inmobiliaria, según informa Efe.

Proceso competitivo

El conocido como ‘banco malo’ lanzó hace unos meses este proceso competitivo para elegir a los nuevos gestores de su cartera bajo un nuevo modelo operativo, en el que se prima la eficiencia en la comercialización y venta de activos, el ahorro económico y la gestión especializada de equipos dedicados en exclusividad a la compañía.

El proceso de evaluación de los candidatos incluía una oferta económica y una parte técnica, donde se evaluaba la capacidad de los aspirantes para prestar el servicio, su infraestructura tecnológica, los equipos dedicados y la propuesta de comisiones a cobrar.

Pese a haberse caído de este proceso, Servihabitat seguirá trabajando con la Sareb en otro proyecto. En julio, la sociedad eligió al servicer como gestor especializado para el desarrollo urbanístico de un conjunto de 51 suelos, valorados en 107 millones de euros y con una edificabilidad total de 1,2 millones de m2. Los suelos resultantes del trabajo de Servihabitat podrían tener capacidad para construir entre 10.000 y 15.000 viviendas. 

El acuerdo alcanzado entre el conocido como ‘banco malo’ y Servihabitat contempla en el futuro la ampliación de esta gestión a más de 200 activos con más de siete millones de m2 de edificabilidad adicionales, actualmente gestionados por servicers generalistas, una vez finalicen en 2022 estos contratos.